Todos los grupos con representación en las Corts cerraron filas ayer con la estrategia del Consell para combatir la crisis provocada por el coronavirus, a tiempo que reclamaron medidas urgentes para hacer frente a las consecuencias económicas de la pandemia. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se reunió por videoconferencia con los síndicos de los diferentes partidos para analizar la situación. El portavoz socialista, Manolo Mata, abogó por «generar redes de salvación para toda la gente que está sufriendo» a la espera de las medidas económicas que adopten tanto el Gobierno español como la UE. «Nadie se puede quedar atrás. En esta crisis no se pueden repetir los errores de 2008, cuando pagaron la recesión quienes menos tenían», remachó.
La presidenta del PPCV y síndica en las Corts, Isabel Bonig, reiteró a Puig el apoyo y la lealtad de los populares, aunque también le reclamó «medidas económicas inmediatas» porque hay muchas pymes y muchos autónomos «que viven momentos de incertidumbre y que ha pasado de tener ingresos a no tenerlos». Bonig considera necesaria la colaboración público-privada y apela a la unidad de todos, al tiempo que hace hincapié en el Plan de Acción Inmediata que propuso la semana pasada, dotado de 1.000 millones.
El síndic de Cs, Toni Cantó, mostró «total disposición» de su grupo a colaborar con el Consell, al que planteó bonificar las tasas a la Seguridad Social, aplicar una moratoria de impuestos autonómicos y congelar las cuotas de autónomos. Por su parte, el síndic de Compromís, Fran Ferri, pidió la suspensión del pago de hipotecas, alquileres y cuotas de autónomo, y del trabajo presencial en todos los sectores no esenciales; garantizar un ingreso mínimo a todas las personas durante el confinamiento; y la paralización de los desahucios y de los cortes en agua, luz o gas.
Medidas similares planteó la síndica de Unides Podem, Naiara Davó, para quien es importante «garantizar la protección a autónomos y trabajadores» y la suspensión de las hipotecas y alquileres mientras dure la cuarentena. La síndica de Vox, Ana Vega, se puso a disposición de la Generalitat y pidió líneas urgentes de crédito con un interés del 0 % «para evitar despidos» y paliar las consecuencias económicas.
