Los hoteleros valencianos han puesto sus establecimientos a disposición de la Conselleria de Sanidad para hacer frente a la crisis de la epidemia del coronavirus. La conselleria contactó ayer con los responsables de la patronal hotelera Hosbec, que ofrecieron toda su colaboración. Además, los hoteles van a entregar a Cruz Roja los alimentos perecederos que tienen en sus neveras para que sean repartidos entre los más necesitados.

La cadena valenciana Casual Hoteles, que lidera Juan Carlos Sanjuán, fue la primera en poner sus establecimientos a disposición de la Conselleria de Sanidad tras decidir cerrar todos sus hoteles en València para proteger la salud de sus clientes y trabajadores. En los últimos días, la patronal hotelera ha recibido la llamada de cadenas asentadas en Castelló, València y Benidorm que están dispuestas a colaborar ante la crisis sanitaria que está sufriendo la Comunitat Valenciana.

Desde Hosbec rechazaron dar los nombres de las cadenas, pero insistieron en que el sector quiere ayudar en esta crisis. Esta situación se produce en un momento en el que los empresarios hoteleros se han visito obligados a clausurar sus establecimientos y a ejecutar Expedientes Temporales de Regulación de Empleo (Erte) ante el desplome de clientes.

74.000 camas

Los hoteles asociados en Hosbec cuentan con un total de 74.000 camas, repartidas entre sus 204 hoteles y 42 bloques turísticos asociados. Fuentes de Hosbec explicaron que responsables de la Conselleria de Sanidad contactó ayer por la mañana con ellos para comprobar si sería posible habilitar los hoteles como hospitales donde trasladar a los pacientes que no requieran cuidados intensivos. «Se trata de pacientes que no están muy graves y que tienen una buena evolución», precisó la secretaria general de Hosbec, Nuria Montes.

La directiva de la patronal advirtió de que el problema es que en algunas zonas del interior como en las comarcas de Els Ports, El Maestrat o l'Alcoià no hay una planta tan desarrollada como en la costa. «A los pacientes no se les puede hacer grandes traslados. En Benidorm hay una planta hotelera muy grande, pero a lo mejor hay más necesidades en otros puntos. El hotel más pequeño de Benidorm tiene 200 plazas», recordó Nuria Montes. Los hoteleros están convencidos de que las medidas de confinamiento impuestas por el Gobierno para reducir la tasa de transmisión del virus van a ser efectivas a medio plazo y provocarán un descenso de los contagios.

La Conselleria de Sanidad tampoco les ha concretado cuando prevé que sería necesario utilizar la planta hotelera ante la falta de camas en los hospitales valencianos. Por ello confían en que finalmente no será necesario que los pacientes tengan que ingresar en los hoteles, aunque se han ofrecido ya a colaborar para estar preparados en el caso de que sea necesario.

Una segunda medida solidaria que ya han activado es el reparto de comida. Ante el desplome de las cancelaciones a última hora (un hotel de València con más de 220 habitaciones tuvo el lunes solo dos ocupadas), los hoteleros han acordado con Cruz Roja el reparto de la comida perecedera que tienen en sus neveras y despensas ya que son conscientes de que esta situación se va a prolongar varias semanas. «Esta crisis sanitaria está provocando el cierre de comedores sociales para evitar la propagación de la epidemia y los más desfavorecidos necesitan esta ayuda», subrayaron desde la patronal.

Grave crisis económica

Por otro lado, el presidente de la patronal Hosbec, Toni Mayor, señaló ayer que la crisis por el coronavirus es «más importante que la crisis económica de 2008», aunque se mostró confiado en que se producirá un «rebote fuerte» cuando se «domine» la situación porque existe «mucha demanda insatisfecha» y habrá «mucha colaboración de todos para salir». En cuanto a las previsiones, Toni Mayor admitió que no se puede saber cuanto va a durar esta situación: «firmaría ya que el 15 de junio estuvieran todos los hoteles abiertos».