El Oceanogràfic y el Bioparc presentaron ayer las medidas que han adoptado para garantizar el bienestar de los animales y sus correspondientes hábitats, además de la seguridad de sus cuidadores, tras echar el cierre durante el pasado sábado por el estado de alarma.

El Oceanogràfic, que conserva más de 15.000 animales de más de 500 especies, aseguró que desde que cerraron sus puertas mantienen sus actividades internas con el objetivo de preservar la salud de los animales. En ese sentido, el personal del acuario, entre los que destacan cuidadores, entrenadores, veterinarios o técnicos de laboratorio, garantiza la alimentación y el ejercicio de los animales, las revisiones y la calidad ambiental de las instalaciones acuáticas y sus exteriores y un equipo de limpieza desinfecta la entrada y salida del trabajo y las áreas comunes en cada cambio de turno.

Las existencias almacenadas permitirán garantizar la alimentación de todos los animales del centro hasta el mes de junio incluido. El Oceanogràfic también ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias su máquina de anestesia con ventilador mecánico para la respiración asistida, un aparato homologado que puede usarse en las personas.

Finalmente, los 42 millones de litros de agua repartidos por diferentes espacios y las 375 especies entre árboles y arbustos, las 28 clases de palmeras y 50 de árboles seguirán atendidos por el personal técnico.

Por otro lado, el Bioparc, donde viven más de 3.000 animales en cautividad de 160 especies, concentrará unas 70 personas para trabajar. Para ello, se ha creado un cuerpo directivo y un retén mínimo de otros departamentos para prestar servicio, tanto presencial como telemáticamente, al parque y a los equipos de trabajo establecidos. También han formado tres brigadas multidisciplinares de 20 personas que incluyen cuidadores, veterinarios, limpieza, jardinería y mantenimiento que trabajarán durante periodos de tres días. Desde el parque también aseguran que han contactado con los distintos proveedores para que el abastecimiento de todos los víveres no falle. Asimismo, también manifiestan que, para garantizar la viabilidad de la empresa, se ha iniciado la tramitación de un ERTE que abarcará departamentos y servicios afectados directamente por la ausencia de visitantes y también aclararon que existe el compromiso de la reincorporación de las personas implicadas en ese ERTE.