La Policía Nacional ha denunciado a cerca de 3.500 personas, 846 de ellas en un solo día, el pasado sábado, y ha detenido a 33 personas por saltarse la orden de confinamiento en los términos que recoge el real decreto de estado de alarma, en vigor desde hace ya una semana ante la pandemia por coronavirus.
Durante los tres primeros días, las fuerzas de seguridad, siguiendo directrices del Ministerio del Interior, se limitaron a realizar labores informativas a las ciudadanos, ante la excepcionalidad de la medida y la brusquedad con que fue impuesta. Interior aplicó la máxima de la mano izquierda, pero, a partir del miércoles y ante la evidencia de que cada vez más ciudadanos rompían el confinamiento con excusas cada vez más peregrinas, el ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska decidió dar un paso al frente y amparar el trabajo de sus agentes en la calle.
Así, las denuncias (y alguna detención aislada), que habían brillado por su ausencia en las primeras 72 horas de aplicación, empezaron a caer en cascada. Desde las 0.00 horas del domingo 15, cuando entró en vigor el decreto que ordena estar confinados en casa como último recurso para evitar la alocada propagación de una pandemia que está siendo especialmente letal con las personas mayores, pero que afecta a cualquiera y que sin aislamiento complica su control, hasta las 8.00 horas de hoy, la Policía Nacional ha propuesto para sanción a 3.456 personas y empresas -entre ellas, al Mercado Central de València por no guardar las debidas normas sanitarias para evitar contagios- y ha detenido a 33 , estos últimos, en los casos más graves de desobediencia a la Policía.
Sólo el sábado, cuando se endureció la acción policial ante el posible intento de parte de la ciudadanía de romper el aislamiento para ir a pasar el fin de semana a segundas residencias, la Policía Nacional detuvo a siete personas -cuatro en Alicante y tres, en València- y propuso para sanción a 846.
Además, fuentes policiales han informado de que, en este momento, solo hay dos casos positivos dentro de las filas de la Policía Nacional. Uno en Alicante y otro en València. Este segundo es el responsable de la Inspección Central de Guardia, sita en el complejo policial de Zapadores, por donde transitan la gran mayoría de agentes, uniformados o no, porque es en ese punto donde comparecen para instruir las diligencias que siguen a cada intervención y a cada detención.
El afectado, que está hospitalizado con neumonía pero presenta una buena evolución, no estaba en contacto directo con los agentes que acuden a ese punto para dar cuenta de cada servicio, por lo que el riesgo de contagio a otros compañeros se reduce.
La Policía Nacional no ha informado de a cuántos agentes ha tenido que enviar a casa, para guardar la correspondiente cuarentena al haber estado en contacto con un trabajador que ha dado positivo en Covid-19, la enfermedad que desarrolla este coronavirus.
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