La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, que está ingresada desde el domingo por una infección respiratoria, ha dado negativo a la prueba de coronavirus que le realizaron en un primer momento en la Clínica Ruber, de Madrid. Aún así, según un comunicado del Gobierno, los médicos consideran que ese primer test no es «concluyente», por lo que han decidido someterla a nuevas comprobaciones para confirmar si está infectada por el virus.

Mientras tanto, Calvo continúa hospitalizada y recibiendo el tratamiento médico prescrito para la infección respiratoria, hasta que se determine si es o no Covid-19. La dirigente socialista, de 62 años, está en una habitación aislada. Ayer, el Ejecutivo confirmó que su área de trabajo en el palacio de la Moncloa ha sido desinfectada de forma preventiva. De confirmarse, sería el tercer positivo en el Gobierno, tras los de la ministra de Igualdad, Irene Montero, y de Política Territorial, Carolina Darias. Su última aparición fue el pasado miércoles, cuando asistió al pleno del Congreso de los Diputados en el que el Gobierno informó sobre la declaración del estado de alarma.