Debilitado por un maremagnum de críticas que no ha hecho más que empeorar en la última semana, el Gobierno trata de calmar el enfado de la oposición por no haber sido informada de las últimas medidas contra el coronavirus. El Ejecutivo busca ahora promover una imagen de unidad. Pedro Sánchez contactará en los próximos días con los líderes de los partidos para ponerles al corriente, una decisión que se confirmó ayer después de que el Ejecutivo rescatase la idea de promover una cooperación similar a la de los Pactos de la Moncloa, los acuerdos entre formaciones de todos los signos políticos que en 1977 posibilitaron la reconstrucción del país.

Los partidos, sin embargo, no parecen demasiado receptivos a la idea. Ya no solo critican al Ejecutivo por implementar medidas de forma tardía o ineficaz, sino que ahora centran sus acusaciones en la «unilateralidad» con la que, dicen, actúa Sánchez.

El ministro Ábalos tendió el guante a primera hora, cuando señaló que una reedición de los Pactos de la Moncloa, con una fórmula adaptada a la nueva realidad, sería «un marco positivo». «Si nos planteamos un proyecto de país, de carácter nacional, de acuerdo... vienen muy bien, porque la unidad y el compromiso siempre fortalecen estos proyectos de carácter nacional», dijo en RNE. La idea la había lanzado el propio Sánchez ante el Congreso de los Diputados, cuando compareció a informar sobre la declaración del estado de alarma, el 18 de marzo. Explicó entonces que aquel acuerdo puso fin a la espiral de inflación, encarriló el ingreso de España en la UE y modernizó la economía en tiempo récord. «La unión de todos los hizo posible», recordó.

Rebajar la tensión

En la línea de rebajar las críticas recibidas en los últimos días, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño; la de la Transición Ecológica, Teresa Ribera; la ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la ministra de Industria, Reyes Maroto; y el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas; y el ministro Seguridad Social, José Luis Escrivá, se reunieron ayer con la mesa de diálogo social.

Las intenciones del Ejecutivo tratan de paliar una comunicación que hasta ahora parecía una mera declaración de intenciones. El malestar de los partidos volvió a evidenciarse ayer en la comisión de Sanidad del Congreso en la que PP, Vox, PNV y Ciudadanos lamentaron que el Ejecutivo no les mantiene informados y actúa con «unilateralidad».

El PP lleva cuatro días denunciando que el Gobierno no ha llamado a Pablo Casado ni para consultar su opinión ni tampoco para anunciarle las trascendentales medidas económicas y sociales que está tomando. En una entrevista en Telecinco, el presidente de los populares acusó ayer a Sánchez de «arrogancia» e «incompetencia» por no tener en cuenta a la oposición en la respuesta a esta crisis. En términos parecidos se pronunciaron dirigentes de Ciudadanos y Vox.