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"Me gustaría que tras la crisis se valore más lo público"

«Lo que peor llevo es no poder ir a ver a mis padres que viven en Sollana y salir al parque»

"Me gustaría que tras la crisis se valore más lo público"

Lara Siscar, valenciana de Gandia, reflexiona sobre el confinamiento desde su casa de Madrid. No lo lleva mal porque es una mujer casera y muy lectora. Hace ejercicio y charla con la familia y amigos y las horas le pasan rápido leyendo periódicos y libros. «Es mi rutina de tiempo libre habitual, solo que ahora desde casa sin poder salir al parque o a las terrazas», explica. Precisamente las terrazas de los bares de Madrid siempre repletas es lo que echa de menos.

Pero lo que peor lleva es la lejanía de sus padres que viven en Sollana y a los que tenía previsto ir a ver cuando llegó la pandemia. «Pude viajar, pero no quise arriesgarme porque podía llevar el virus, pero entienden que trabajando en TVE no puedo estar en otro sitio. Soy hija única y me cuentan que los vecinos están muy atentos y se lo agradezco mucho. Yo les llamo dos veces al día. A lo mejor es un abuso por mi parte pero de momento no se quejan y siempre encontramos algo que decirnos», relata la presentadora.

«Ojalá aprendiésemos algo de todo esto. Dijo el escritor Manuel Vilas en el Telediario que si cuando volvamos a la normalidad empezamos a necesitar menos cosas ya se habría sacado algo bueno. No he reflexionado a fondo sobre esta cuestión, pero tal vez menos glotonería de cosas superficiales podría ser una buena consecuencia. Pero no tengo mucha fe en que las personas cambien. Creo que quien es miserable suelta aún más miseria en situaciones extremas. Lo vemos cada día en las redes sociales. También creo que quien vale la pena se crece y se hace mejor aún, porque esa persona sí que aprende. Estoy convencida de que, como sociedad, empezaremos a valorar más y mejor la necesidad de un firme sistema sanitario público y confío en que, antes de que se nos esfume el susto del cuerpo, aprendamos a exigírselo a nuestros representantes públicos. Ya sea por solidaridad de especie, ya sea por puro egoísmo. Eso me da igual. En este caso el fin justifica el camino», reflexiona.

Recuerda cuando dieron la noticia de los primeros contagios. «Un escalofrío nos acompaña desde entonces y una realidad que no da respiro». La redacción de TVE, añade, está algo reducida por el virus y dividida para evitar contagios. «Hay mucho puesto vacío, pero nada comparado con otros gremios que se juegan el pellejo».

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