La cifra de víctimas en residencias volvió a experimentar un repunte en el recuento oficial de ayer, hasta el punto de representar un 70% de los nuevos fallecidos registrados en al Comunitat Valenciana en las 24 horas previas. De las 35 últimas defunciones contabilizadas por coronavirus, 25 eran usuarios de alguno de los 102 geriátricos en los que se han detectado casos.

La infección ha afectado ya a 837 residentes y 227 trabajadores de centros de mayores. Hasta la fecha, 191 usuarios han fallecido y 12 instalaciones han sido intervenidas y medicalizadas por la Conselleria de Sanidad.

Ayer, el Defensor del Paciente dirigió un escrito a la fiscal superior del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), Teresa Gisbert, pidiendo la apertura de una investigación de oficio en relación con los fallecimientos de ancianos en las residencias de personas mayores durante la crisis sanitaria. La entidad ha recopilado los casos de muertes de mayores residentes en estos centros y advierte de la «gravedad» de los hechos. El Defensor del Paciente reclama una «investigación profunda» de todas y cada una de las residencias de ancianos, actuaciones, personas de seguridad o limpieza.

La consellera de Sanidad, Ana Barceló, recalcó ayer que todas las anomalías son trasladadas a las administraciones y a las direcciones generales oportunas para encontrar soluciones, aunque hizo hincapié en que las inspecciones desplegadas revelan que «hay un número muy importante de residencias que están cumpliendo a rajatabla los protocolos, así como las restricciones y aislamientos que se deben producir». Barceló detalló que, cada día, la conselleria informa a la Fiscalía de la situación de las residencias y delos casos que se producen en ellas.