El coronavirus ya es la causa de una de cada cuatro muertes registradas en València ciudad desde el 14 de marzo. Sin embargo, el impacto de la covid-19 podría ser mayor porque solo en el partido judicial de la capital hay 65 fallecimientos sospechosos que no figuran en la estadística oficial porque perdieron la vida antes de que le practicaran la prueba.

Así se desprende de los datos que constan en el Registro Civil de València, el mayor partido judicial de la C. Valenciana, a los que ha tenido acceso Levante-EMV. Según esta información, entre el 14 de marzo y el 7 de abril se inscribieron un total de 801 defunciones en la ciudad del Turia.

Del total de fallecimientos, 226 fueron provocados por coronavirus -alrededor del 28 %- y otros 65 -el 8 %- han sido inscritos en los juzgados como sospechosos por los informes médicos que figuran en el expediente. Los facultativos constatan en sus informes que los pacientes tenían los síntomas pero puntualizan al Registro Civil que no se les llegó a realizar el test.

Estas cifras incluyen a todas las personas nacidas en otros puntos de la C. Valenciana, pero que fueron derivados a València y perdieron la vida en centros hospitalarios de la ciudad.

Las estadísticas oficiales recogen el número oficial de fallecidos a los que se les ha practicado la prueba y no incluye a quienes han fallecido por causas compatibles con la enfermedad de la covid-19 pero no se les ha realizado el test. El número oficial de fallecidos en las tres provincias valencianas desde que se inició la pandemia se elevó ayer a 796 personas. Cuatro de las víctimas eran sanitarios.

Un desajuste menor

No obstante, el desajuste en la C. Valenciana podría ser menor al de otros territorios, pues desde el Consell puntualizan que han incluido en las estadísticas a las personas fallecidas en residencias de ancianos en los que ha habido brotes de la enfermedad aunque no se les haya realizado el test.

La Conselleria de Sanidad ha admitido en los últimos días el desajuste en las estadísticas oficiales y ha señalado que las cifras reales no se podrán conocer antes de tres meses porque no se están realizando autopsias ni necropsias a personas cuyo origen o detonante del fallecimiento se desconoce.

Magistrados responsables de los registros civiles valencianos se han dirigido por carta al Tribunal Superior de Justicia de la C. Valenciana para trasladarles su preocupación por el elevado número de fallecidos con síntomas compatibles con la covid-19 sobre los que tienen que expedir un certificado de defunción sin conocer el origen de la muerte. Es el caso de una juez de Vila-real, cuya petición ha sido remitida al Consejo General del Poder Judicial para su conocimiento.

La consellera de Sanidad, Ana Barceló, aseguró ayer que desconocía estos datos porque el departamento que dirige no tiene acceso al número de certificados de defunción que se presentan en los registros civiles. Barceló se mostró partidaria de seguir con el actual método de recuento: «Hay que ser rigurosos con los datos y darlos tal y como conocemos, que es cuando han dado positivo o fallecieron en una residencia».