La epidemia de coronavirus dio signos ayer de haber descendido un nuevo escalón en España. Las muertes diarias cayeron este lunes por vez primera desde hace casi un mes a menos de 400, exactamente 399, mientras que los nuevos contagios se sitúan en 4.266, una cifra muy reducida si se tiene en cuenta que el número de pruebas que se están efectuando es el doble que semanas atrás y que entre ellos figuran 1.385 personas que ya habían dado síntomas hace más de dos semanas.

Los datos son tan buenos que llevaron al director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, a abandonar su habitual prudencia. «Llevamos cinco semanas de confinamiento y los estamos consiguiendo», «la incidencia está bajando incluso más de los pensábamos», «tenemos que estar contentos y felices». Son algunas de las frases pronunciadas ayer por Simón, que en cualquier caso, no se olvidó de añadir que «no podemos relajarnos» pese a lo logrado hasta el momento. Hacerlo equivaldría a «tirar por tierra todo lo conseguido», avisó.

La cifra de 399 fallecidos no comporta una gran disminución respecto al día anterior, en el que se habían registrado 410, pero lo trascendente es que en las dos últimas jornadas se ha logrado superar el estancamiento que se arrastraba desde que hace 10 días se bajó de las 600. En la última semana la cifra no había dejado de oscilar entre los 500 y los 600. El número total acumulado de casos confirmados se sitúa en 20.852.

Mejor evolución que Italia

Otro dato a tener en cuenta es que Italia, que lleva más de una semana de ventaja a España en la lucha contra la epidemia, aún no ha logrado bajar de ese umbral de las 400 muertes, quizás porque su confinamiento no ha sido tan estricto. Ayer, registró otros 454 fallecimientos. Será ya muy difícil que la pandemia concluya con más muertes en España que allí.

Volviendo al ámbito nacional, la cifra total de contagios ascendió ayer hasta los 220.210 y es muy significativa la caída en picado del porcentaje de positivos sobre el total de pruebas PCR, el tipo de test más fiable. Si hace cuatro semanas el 26,8 % de las personas analizadas estaban infectadas, la semana siguiente está proporción fue del 18 %, la siguiente del 8,4 % y en la pasada sólo 3,1 de cada cien pruebas dieron positivo.

La mejoría puede constatarse también en el número de hospitalizados. En el caso de Madrid, la autonomía más afectada, los ingresados en la actualidad por la covid-19 son 8.191, cerca de la mitad que cuando la epidemia alcanzó su pico máximo. En las UCI madrileñas hay 400 ingresados menos que en el momento de mayor presión. En el total nacional, los pacientes ingresados en las unidades de intensivos (de los que sigue sin ofrecer el recuento total) y los hospitalizados solo han subido un 0,7 % y un 0,8 %, respectivamente, en relación a semanas anteriores. También se puede ver en el número de recuperados. Son ya 80.587, lo que supone 3.230 nuevos en un día.

Quizás la nota más triste corresponda al número de sanitarios infectados que ya ha subido a 31.053, un 14% de todos los contagiados. Sanidad ya ha reconocido en más de una ocasión que una parte de esta alta proporción se debe a la insuficiente material de protección suministrado.