Fernando Simón lanzó ayer un aviso a los padres ante la relajación del confinamiento para los niños: si interpretan que pueden salir a la calle a partir del 27 de abril para jugar habrá «problemas». «Si la gente piensa que esto va a ser abro la puerta y que se junten con los niños de todo el vecindario, ahí podemos tener un problema», alertó Simón, que llamó a los progenitores a realizar un ejercicio de «responsabilidad individual». Simón defendió que los menores puedan salir a la calle, a pesar de que no se les identifique tan fácilmente como transmisores de la enfermedad porque no les afecta de la misma forma a ellos como sí lo haría en adultos. «Llevamos ya un mes y una semana de confinamiento y por tanto la probabilidad de que estén infectados es muy baja», defendió. Además, «no implica un aumento del riesgo», ya que los niños llevan más de un mes confinados en casa con sus padres y sus hermanos y, por tanto, «el mismo riesgo que tienen ahí, lo tienen fuera». Simón desconoce cómo quedará el decreto que permitirá a los menores salir, pero avanzó que «no van a salir libremente», sino que van a ser «salidas

controladas.