El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha ofrecido al resto de grupos y a la sociedad un gran acuerdo valenciano para la reconstrucción. El jefe del Consell ha comparecido en las Corts en la primera diputación permanente desde la declaración del estado de alarma por la pandemia con un discurso solemne para un tiempo convulso.

Con ese tono, Puig ha puesto encima de la mesa "un acuerdo en mayúsculas. Un gran acuerdo valenciano de toda la sociedad", en la línea de lo avanzado por Levante-EMV en su edición de hoy. El president ha abogado por "huir del partidismo", porque si no es ahora, ¿cuándo lo será? ¿Con qué cara nos miraremos y nos mirarán?" "Acuerdo, señorías", ha señalado ante los 18 parlamentarios que forman parte de la diputación permanente de las Corts.

"Es un tiempo para la unidad, la fraternidad y la responsabilidad, para la ayuda mutua", ha asegurado. Y ha pedido "perder el miedo al miedo".

El president ha encontrado una respuesta receptiva de los líderes de PP, Isabel Bonig, y Ciudadanos, Toni Cantó, aunque ambos le han pedido concreción. Bonig ha incidido además en una reducción de los altos cargos ante un tiempo muy complicado. Y ambos han reclamado test masivos antes de la desescalada.

Puig ha comenzado su intervención con una petición de disculpas por la falta de material de protección para los sanitarios y con un homenaje a la población en primera línea y a los mayores como principales víctimas de esta epidemia.

El jefe del Consell ha revelado asimismo la factura del primer mes y medio de combate contra el coronavirus: 341 millones de euros, de los que 52,5 millones corresponden a la compra de material de protección, sobre la que ha destacado que la Generalitat fue pionera.

Una gran lección, ha dicho, de esta crisis para el futuro "es que no podemos depender de importaciones extranjeras para suministros estratégicos".

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