Nuevos contagios al día, ocupación de camas en planta y en UCI, capacidad de ampliación de estas camas, profesionales dedicados a rastrear los nuevos casos o fallecidos dentro y fuera de residencias de mayores son algunos de los indicadores clave que el Ministerio de Sanidad tendrá en cuenta en el ámbito sanitario para permitir que cada provincia española -o cada área de salud en el caso de la Comunitat Valenciana- pueda avanzar en la desescalada y cambiar de fase hacia la «nueva normalidad».

Entre todos estos parámetros los nuevos casos diarios y la capacidad que tenga el sistema sanitario concreto de la zona para manejarlos (desde el rastreo en Atención Primaria hasta la hospitalización), serán vitales para tomar esta decisión aunque, según explicaron ayer desde el Ministerio de Sanidad y verbalizó la consellera del ramo, Ana Barceló, también se tendrán en cuenta cuestiones de movilidad o socioeconómicas como empresas en ERTE o consumo eléctrico, por ejemplo, para pedir el cambio de fase, siempre avalado por «informes epidemiológicos y técnicos».

La Comunitat Valenciana se presenta a este examen de la desescalada nacional habiendo hecho los deberes. La tasa de incidencia de la enfermedad con respecto al total de la población es de un 20,88 % por 100.000 habitantes lo que deja a la C. Valenciana como la sexta región con mejor situación a día de hoy para iniciar la desescalada solo por detrás de Murcia, Canarias, Ceuta, Melilla y Andalucía, autonomías donde el virus ha tenido un impacto menor. Esa buena situación en el global autonómico, sin embargo, habrá que despiezarla en 24 partes, una por cada área de salud en las que está dividido el territorio valenciano. Será esta la unidad a tener en cuenta y cada uno de los hospitales, comarcales o de mayor tamaño, deberán ser evaluados diariamente para ver si pasan el corte.

Ver la situación real

La Conselleria de Sanidad ofrece desde hace pocos días los datos de incidencia del virus desgranados por departamentos de salud. En esa actualización diaria se puede ver el total de contagios que tiene cada área de salud, la tasa relativa de incidencia según el volumen de población que acoge cada área y lo mismo en relación a los fallecidos. Echando un vistazo a estos datos, se podría pensar que las áreas peor paradas o que avanzarán más despacio son aquellas con peores cifras como el departamento de Requena que tiene una tasa de incidencia de 806 con solo 415 fallecidos. Expertos consultados por este diario alertan de que estos datos son los acumulados desde el inicio de la pandemia y que no son, por tanto, una foto «real» de lo que está pasando ahora mismo en cada área de salud ya que la incidencia de la enfermedad se mide como un todo y no se puede discernir qué está pasando en los últimos días.

De hecho, la comparativa de incidencia que usa el Ministerio de Sanidad entre regiones utiliza la incidencia de casos de los últimos 14 días y toma en consideración solo los positivos registrados por PCR y no por test rápido, prueba que puede encontrar casos positivos que hayan pasado la enfermedad que no la tengan ahora y por tanto sean contagios antiguos.

Será, por tanto, el estudio de nuevos contagios diarios y de hospitalizados y en UCI el que determine la situación real de cada área de salud y no el acumulado desde el inicio de la pandemia.