El sábado se abre a la veda para el deporte individual al aire libre. Pero, entre las certezas sore la desescalada hay dudas por despejar: ¿Cuándo se podrá ir a la piscina? ¿Y correr en las pistas? ¿Y al gimnasio? ¿Y jugar al tenis? ¿Y al pádel? ¿Y organizar una pachanga de fútbol o baloncesto con los amigos? La desescalada en el deporte aficionado será muy progresiva y dependerá de varios factores. ¿Nadar en el mar? Mientras las playas estén cerradas, no será posible. Las pautas para el deporte profesional han quedado más claras: a partir del próximo lunes, 4 de mayo, los deportistas profesionales, federados y ligas profesionales volverán a sus entrenamientos de manera individual.

Fase 0 (4 de mayo)

El deporte al aire libre y sin

contacto se adelanta al sábado

? Los deportes que se pueden practicar por la calle o por la carretera son los primeros beneficiados. El sábado se podrá salir a disparar las endorfinas al aire libre: Correr, montar en bici, patinar... Siempre de manera individual, a 10 metros de distancia del resto de personas, y con la protección adecuada (mascarilla cuando sea posible). La gran duda planteada al principio, de si era posible o no salir en bici, está resuelta. En el texto del Gobierno se incluye el surf, lo que podría abrir la puerta a los practicantes de la natación en mar abierto. Pero eso no sucederá hasta que las playas estén abiertas. En Italia, los deportes náuticos, incluida la vela, ya están permitidos.

Fase 1 (11 de mayo)

Apertura de instalaciones de deportes sin contacto

Se reabrirán las instalaciones al aire libre para los deportes individuales en los que no exista contacto: pistas de atletismo, pistas de tenis o los campos de golf. Queda la incerteza de conocer si se abrirán las piscinas descubiertas, porque el CSD ha dicho que lo tiene que estudiar. El documento especifica que se podrán abrir centros deportivos con cita previa sin contacto y sin utilizar los vestuarios, pero los gimnasios aún deberán de esperar. Sí que se permitirá la práctica de la gimnasia y de artes marciales, pero poco más.

Fase 2 (25 de mayo)

Deportes de «bajo riesgo»

y, quizá, la natación

? Esta es la fase 2 más inconcreta para el deporte no profesional. Si todo va bien, se permitirá la apertura de instalaciones cerradas sin público y para «deportes en los que no exista contacto o el riesgo de contagio sea bajo». Pero, ¿a qué se refiere con riesgo de contagio bajo? No está especificado. Como quedan varias semanas para llegar a la Fase 2, los detalles irán aflorando con el paso de los días. Pero es evidente que la prudencia seguirá marcando la vida deportiva de la gente. Si la curva de contagios sigue a la baja, no se descarta que se permitan partiditos de fútbol sala o de baloncesto. Mucho más fácil lo tiene el pádel y, probablemente, llege el momento de la apertura de las piscinas cubiertas. Como ocurre con las playas, ahí tienen mucho que decir los ayuntamientos.

Fase 3 (8 de junio)

La hora de los gimnasios

El 8 de junio llegará la reanudación de las actividades deportivas al aire libre en términos similares a las actividades culturales y de ocio de esta fase (es decir, con reducción de aforo). En la fase 3 se acepta que se incorpore el público de manera muy limitada si hay algún tipo de competiciones . En esta medida sólo se habla de gradas, pero desde el Gobierno se concreta que también entrarán los gimnasios. Abrirán sin posibilidad de que se utilicen los vestuarios y con un tercio del aforo.

Una vez superadas con éxito estas 4 fases, se entrará en lo que se ha denominado «La nueva normalidad», de la que seguro no nos libraremos de la mascarilla y de medidas de seguridad y control severas.

El deporte profesional

A partir de la fase 1, en el deporte profesional se tolerará el «entrenamiento medio»: en grupos reducidos, de un máximo de 8 personas. Los entrenamientos colectivos, a partir de la fase 2, mientras que de público en las gradas no hay nada prestablecido hasta la vuelta a la normalidad. Si los objetivos se cumplen. España se plantearía retomar las competiciones a partir de mediados de junio, pero sin público o con entradas muy limitadas en las gradas.