Los nombres de Rita y Cesare no son especialmente conocidos en Castelló, pero si decimos que se trata de los casos número 2 y 3 de coronavirus en la provincia, que dieron positivo el pasado 5 de marzo cuando llegaron conduciendo su caravana al Hospital Provincial, quizá más lectores comenzarán a recordar de quiénes se trata.

De lo que pueden estar seguros es de que ellos nunca se olvidarán de Castelló y sobre todo del personal sanitario del Hospital Provincial que les atendió y que hizo todo lo posible para que pudieran volver sanos y salvos a su lugar de origen.

Este matrimonio de turistas jubilados del norte de Italia llegó a Castelló porque son apasionados de España. Procedían de Bérgamo, la zona cero del coronavirus del país transalpino, pues en su provincia se han registrado 11.000 casos de covid-19, así como 3.000 fallecidos. Partieron el 29 de febrero y después de dos días llegaron a España. Hicieron una parada en Torrenostra y al día siguiente se asentaron en Benicàssim.

«Aquella noche Cesare comenzó a tener fiebre y tos; también Rita, pero menos», recuerdan. Lejos de remitir, los síntomas fueron a más, por lo que acudieron a Urgencias del citado centro sanitario.

«Nos hicieron pruebas y nos ingresaron. Los primeros días fueron muy duros, sobre todo para Cesare, pero estábamos tranquilos porque en el hospital nos sentíamos protegidos», aseveran estos apasionados de España que han recorrido ya en tres ocasiones el Camino de Santiago. Destaca hoy la pareja «la profesionalidad, cortesía y simpatía de todo el personal del hospital. Nunca lo olvidaremos, ni terminaremos de agradecerlo suficientemente».

Hogar, dulce hogar

Una vez recibieron el alta hospitalaria afirman que permanecieron unos días en la caravana, pues esperaban las dos pruebas negativas de Rita, pero finalmente pudieron partir de regreso a su casa. «Después de un duro viaje llegamos a nuestro hogar y pudimos abrazar por fin a nuestro hijo Lorenzo que todavía vive con nosotros, aunque tuvimos que estar aún en cuarentena dos semanas más», rememora la entrañable pareja.

Rita y Cesare se han quedado, eso sí, con más ganas de Castelló. Es por ello que una vez les sea posible volverán para disfrutar de la experiencia frustrada por el maldito covid-19: «Cuando sea posible nuestra intención es volver porque queremos conocer, agradecer y abrazar a quienes nos han curado y verles la cara, ya sin mascarilla por fin».

Sobre la situación que están viviendo a día de hoy en Italia por la pandemia lamentan que no dista mucho de la que se sufre en España: «Las medidas de restricción son aún muy severas sobre todo en Lombardía. Esperamos que las cosas mejoren rápidamente y que se pueda volver a una vida normal, o casi normal porque todos estamos cansados de esta situación».