Con 22 años, una vida por delante y con el objetivo de ayudar a los demás, Alba Aparicio, psicóloga valenciana, encontró la muerte el pasado sábado cuando la avioneta en la que viajaba se estrellaba en Bolivia por causas que se están investigando. La chica volaba junto con otros tres españoles y dos tripulantes bolivianos, en un aparato de la Fuerza Aérea de Bolivia con destino a la ciudad de Santa Cruz, para desde allí tomar el miércoles un vuelo de repatriación a Madrid, con motivo del coronavirus.
Alba colaboraba como cooperante de la asociación Psicólogos sin Fronteras, que tiene una delegación en València. Según explica Marcia Montoya, miembro de esta organización en Bolivia, la joven recién licenciada había comenzado su trabajo en la región amazónica de Beni, de la que es capital Trinidad, en septiembre del año pasado y lo concluyó en marzo.
Durante su estancia en el país, Alba realizó labores de voluntariado, tratando a víctimas de violencia de género e intrafamiliar. Pese a finalizar el programa, tenía previsto viajar por el país boliviano antes de volver a España, pero el Gobierno declaró el estado de emergencia sanitaria por el coronavirus, que incluye la prohibición de viajes dentro del país.
Por este motivo, Alba viajaba en la avioneta para enlazar con el vuelo de regreso a Madrid. Según apuntaron fuentes de la Fuerza Aérea Boliviana, el aparato, un bimotor que transportaba a las cuatro personas que iban a viajar a España, sufrió un accidente poco después de despegar de Santa Cruz. Los dos pilotos también fallecieron.Una de las compañeras con las que coincidió en Bolivia, la española Celia Pérez, declaró a medios del país que a Alba «le gustaba mucho Trinidad y que pensaba quedarse a vivir ahí, si bien había decidido acogerse a la repatriación debido al coronavirus. Me comentó que lo hacía por la incertidumbre, pero que una vez todo se solucionara pensaba retornar», comentó Celia.
Desde Psicólogas y psicólogos Sin Fronteras quisieron trasladar su solidaridad para la familia de Alba. «Nos consta el gran afecto que se ganó entre nuestras compañeras de Psicólogos sin Fronteras-Beni, así como el de todas las mujeres a las que pudo prestar su apoyo para que salieran de relaciones de violencia. Ellas también se encuentran muy afectadas por la pérdida de Alba. Nos embarga el dolor y la tristeza por nuestra compañera. Una persona comprometida con la ayuda a las y los demás, y con dar su apoyo a quienes están en mayor vulnerabilidad. Queremos extender nuestro abrazo a la familia de Alba y a todas las personas que la querían» explicaron.
El cónsul general de España en Santa Cruz está en contacto con los familiares de los fallecidos. El Consulado también está en contacto con las autoridades locales.
Los otros españoles fallecidos son Francisco José G.G., su esposa Deliz S.V. y Yandira O.V., estas dos últimas bolivianas nacionalizadas españolas, mientras que los bolivianos que perdieron la vida son el capitán Fabio Daniel J.L. y el teniente Richard Anderson C.B. de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), que tripulaban la avioneta.
El pésame de Ximo Puig
El gobierno de España, el presidente de la Generalitat y la consellera de participación dieron ayer su pésame a las familias de las víctimas. Ximo Puig lamentó la muerte de la cooperante valenciana y destacó su «ejemplo de solidaridad y lucha por las personas más desfavorecidas», recordando que «con solo 22 años estaba haciendo una labor admirable de ayuda a otras mujeres». «Que su luz nos ilumine a todos y todas», ha expresado Puig.
