El Gobierno aprobó ayer un tercer tramo de avales del Estado, a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), por importe de 24.500 millones de euros para créditos a empresas, pymes y autónomos afectados por el impacto económico de la crisis del coronavirus.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, explicó que de ese total, que se suma a los 40.000 millones dispuestos hasta el momento, 20.000 millones irán destinados a avalar a las empresas, 10.000 de los cuales serán para pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos.

Otros 4.000 millones serán garantías para las emisiones de pagarés de compañías no financieras que operen en el mercado de renta fija siempre que tengan su sede social en España, distinción que se establece a fin de evitar que opten a estas ayudas empresas procedentes de paraísos fiscales o que se destinen fondos públicos al pago de dividendos.

El importe máximo del aval, cuya gestión será realizada por el ICO en colaboración con Bolsas y Mercados Españoles (BME), será del 70 % del principal de cada una de las emisiones y el plazo máximo de 24 meses.

El coste será de 30 puntos básicos para avales con vencimiento de hasta 12 meses, y de 60, para avales con vencimiento entre 13 y 24 meses.

Los 500 millones restantes irán a reforzar hasta un 80 % los avales concedidos por la Compañía Española de Reafianzamiento (Cersa), y aumentar la capacidad de las Sociedades de Garantía Recíproca de las comunidades autónomas.