En cuanto a la situación del empleo, Bruselas espera que los ERTE ayuden a limitar el número de despidos y sirvan para garantizar unos ingresos mínimos mientras dure la recesión. Aún así admite que la tasa de desempleo en España se disparará rápidamente (al 18,9 % este año), amplificando el impacto en la economía aunque las pérdidas de empleo deberían reabsorberse en parte a medida que la actividad se recupere. Una recuperación, sin embargo, que será mucho más lenta debido a la gran incertidumbre y al desproporcionado impacto de la crisis en sectores intensivos de mano de obra como el comercio minorista y la hostelería. Hasta el punto de que la tasa de desempleo seguirá a finales de 2021 en el 17 %.