La denuncia de los agricultores de Campanar acerca de los robos y los destrozos que se están cometiendo estos días en sus huertos por parte de los ciudadanos que salen a pasear o hacer deporte en las horas que lo permite el estado de alarma no han caído en saco roto. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) se hizo ayer eco de su denuncia y la Policía Local de València ha anunciado u aumento de la vigilancia en esta zona de la ciudad y en otras que pudieran verse afectadas por este problema.

Como publicó ayer este periódico, los agricultores de Campanar aseguran que los vecinos que pasean por el camino de la Partida están causando problemas en sus campos. Algunos de ellos roban alcachofas, cebollas o lechugas de los campos y, lo que es peor, destrozan los campos recien sembrados dejando a los niños y a los perros pisar los caballones. Es más, amenazan con sacar los tractores a los caminos para protestar por esta situación y denunciar la falta de vigilancia.

Esta denuncia, además, se ha visto ratificada por la La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), que ha advertido que estos robos «agravan la difícil situación que, ya de por sí, atraviesan miles de agricultores afectados por los problemas de comercialización derivados del estado de alarma».

La asociación ha apelado a «la responsabilidad y el civismo que está demostrando la mayoría de la ciudadanía que acude de forma masiva a las áreas rurales» para evitar «los crecientes perjuicios que está provocando una minoría sobre los cultivos de temporada, principalmente cebollas, chufas, calabazas y patatas».

En concreto, AVA-ASAJA alerta de pequeños hurtos, sobre todo en las hileras más cercanas a los caminos, e incluso pisadas y destrozos tanto de personas como de animales domésticos que obligan a los agricultores a acometer labores de reparación.

El presidente de la asociación, Cristóbal Aguado, ha recordado que los campos que hay al lado de la ciudad «son una propiedad privada que todos debemos respetar», y «más, si cabe, tras la crisis de la Covid-19», que ha vuelto a poner de manifiesto «la importancia esencial que tiene la agricultura».

«Puede parecer que robar cuatro cebollas o arrancar una mata de patatas no arruinará al agricultor, pero hay que pensar en las pérdidas sufridas a la larga que supone la repetición de esos pequeños hurtos a diario, más los desperfectos que puedan ocasionarse al entrar a la parcela», señaló.

AVA-ASAJA ha agradecido la campaña de información del Consell Agrari Municipal de València recordando a la sociedad que no está permitido llevar animales sueltos y no recoger sus excrementos; entrar a los campos y salirse de las sendas; coger productos agrarios sin el permiso explícito y por escrito del propietario; y el depósito de cualquier tipo de desechos no relacionados con la explotación agrícola.

Desde la organización agraria también han exigido un aumento de la vigilancia en los caminos rurales situados alrededor de la ciudad de València que mayor afluencia de gente registra en las franjas horarias establecidas por la actual fase de desconfinamiento.

Ayer, precisamente, el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, anunció un incremento de patrullas de estas zonas y aseguró entender las quejas de los agricultores. «No puede ser que la gente salga de su casa ya con la bolsa de plástico para robar, gente que ni siquiera tiene problemas económicos y que como no saben nada de campo lo destrozan todo», dijo.