La catedral de València se ha preparado para afrontar la primera fase de la desescalada cuando se cumplan con los requisitos que establece el Ministerio de Sanidad, y que le permitirá acoger a un máximo de 300 personas, a razón de una por banco. En las últimas semanas, la seo se ha desinfectado, incluyendo todas las capillas, bancos y mobiliario, y ha colocado carteles indicativos para recordar el uso exclusivo por feligrés y garantizar la distancia de seguridad.