La propagación de los casos positivos de coronavirus en España, y su rápida progresión obligaron al Gobierno central a decretar el Estado de Alarma y confinar a más de 46 millones de personas en sus casas. De eso han pasado ya tres semanas y, durante todos este tiempo, cada día hemos escuchado una cifra más alta de contagiados, hospitalizados y muertos; además, la paralización de todas las actividades «no esenciales» se ha traducido en la pérdida de casi 900.000 empleos en España, una cifra sin precedentes que obligó al Estado a prohibir los despidos debido a la crisis del coronavirus.
Con todo esto, los expertos consideran la angustia y la ansiedad como las reacciones más comunes a este tipo de situaciones, aunque hay que evitar trasladarlas a nuestro estado de ánimo o salud mental. «Es totalmente normal tener ansiedad. Además, es posible que se den otro tipo de emociones como la frustración, angustia o miedo. En una situación así, hay que tratar de centrarse mucho en el momento presente, intentando terminar el día, sin pensar en adelante. Mirar al futuro es lo que genera ansiedad», asegura Cristina Romero, psicóloga de la plataforma Omnidoctor.
Con tal de reducir los niveles de ansiedad que podamos padecer, Cristina Romero aconseja «identificar qué es lo que genera esos sentimientos y centrarlos en el presente»: «Una de las cosas que produce más angustia es pensar en todas las posibilidades que pueden ocurrir. Sin embargo, muchas veces es más lo que yo pienso que aquello que, luego, realmente ocurre».
Además, la actual crisis del coronavirus ha creado una situación sin precedentes en el mundo y que ha escapado al control de las personas. Se trata de una nueva amenaza que, entendida como algo desconocido, genera mayor miedo: «Las personas recurrimos a experiencias pasadas para fundamentar nuestra reacción ante algo que nos ocurre. Si me enfrento a algo desconocido es normal que surja el miedo».
Otro de los asuntos que más preocupa a la sociedad y que deriva en episodios de ansiedad a muchas personas es el confinamiento. Con tal de evitar que esto ocurra, la psicóloga recomienda «no pensar en cuánto tiempo queda, porque no lo sabemos. Hay que tener claro que esto pasará, que no es para siempre». Además, propone una serie de consejos con los que pasar mejor los días en casa: «Hay que ponerse metas pequeñas: crear una rutina, no abandonarse a uno mismo, levantarse a una hora prudente, vestir bien, hacer algo especial los fines de semana o todo aquello que, antes, no teníamos tiempo de hacer».
Atención gratuita online
Sin embargo, puede que estas recomendaciones no sean suficientes en algunos casos. Para ello, existen diferentes opciones de ayuda profesional para solucionar problemas puntuales o de larga duración. «Los psicólogos tenemos un papel muy importante en estos momentos para canalizar las emociones», resalta Cristina Romero.
Un ejemplo de ello es Omnidoctor, una plataforma española de telemedicina que, desde el decreto de estado de alarma, ofrece sus servicios de videoconsulta de forma totalmente gratuita durante las 24 horas del día. «No hay que tener miedo a pedir ayuda», confiesa Cristina Romero, una de los más de 300 médicos y psicólogos colegiados y teleformados de la plataforma, que ofrece atención inmediata en casos de medicina, psicología o psiquiatría.«No es malo ir al psicólogo. Se trata del mejor profesional para atender y ofrecer ayuda en este tipo de problemas», añade la psicóloga, quien afirma que «es el momento para romper tabúes».
Además, otro colectivo que va a necesitar la ayuda de estos profesionales es el personal sanitario, que se está enfrentando, desde hace semanas, a la cara más cruda de este virus. «Son personas que están en primera fila de la lucha y están viendo como muere gente a diario. Muchos sanitarios han tenido momentos muy duros y van a tener un estrés post traumático importante», advierte la psicóloga, quien puntualiza que, «aunque sean héroes, pueden necesitar ayuda psicológica en algún momento. Las personas fuertes también lo necesitan».
