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"Las ventas de la tienda virtual nos han salvado"

Un vivero de la Pobla Llarga reabre a los particulares al pasar su área a la fase 1

"Las ventas de la tienda virtual nos han salvado"

Geranios, begonias, pebrella.... Mª Carmen Estarlich esperaba desde hace días que se levantara el confinamiento para comprar plantas con las que dar colorido al corral de una vivienda. Esta vecina de Villanueva de Castellón aprovechó el lunes el primer día en que los municipios adscritos al Departamento de Salud de Xàtiva daban el primer paso en la desescalada al pasar de la fase 0 a la fase 1 para ir de compras a la capital de la Costera y ayer acudió a un vivero de la Pobla Llarga a por las plantas. «La verdad es que tenía muchas ganas de venir», reconocía tras realizar una selección llena de color. Mª Carmen fue la segunda clienta que ayer entró por la puerta de Viveros Alberola, abierta de par en par desde el día anterior.

No obstante, el cambio de fase no se ha notado especialmente en un negocio que, según relata la propietaria, Pepa Alberola, salvo la primera semana del estado de alarma en que permaneció cerrado a cal y canto, ha mantenido la actividad. «La tienda virtual nos ha salvado, ya lo creo», señala Alberola, que incluso estima que las ventas han subido durante el confinamiento, «segurísimo». Su teoría de que la afluencia de compradores depende mucho de las condiciones del día se confirma desde la entrada de la Pobla en la fase 1. Un sol radiante propició el lunes una afluencia notable. Ayer, con el día nublado, la jornada era mucho más tranquila, aunque en un momento en que asomaba el sol aparecieron nuevos clientes.

La condición de mayoristas como proveedores de frutales a agricultores y la venta por internet han permitido a Pepa Alberola y Felipe Chorques mantener la actividad en el vivero durante la crisis del coronavirus, con servicio a domicilio gratuito en un entorno próximo, hasta el punto de haber detectado unos repuntes de demanda inesperados. «Se ha disparado una barbaridad la venta de productos hortícolas: tomateras, pimientos... prácticamente se ha triplicado, la gente lo está plantando en macetas en los balcones de casa, en capazos o cajones, cada uno como ha podido, y se ha desbordado todo», comenta Pepa Alberola. Esa demanda se ha unido a la del agricultor que cada año planta sus propias verduras para autoconsumo. «Eso se tenía que plantar a finales de marzo o abril, si no la gente no come verano», comenta.

Otro repunte de la demanda se produjo con motivo del día de la madre. «Habíamos comprado flores con miedo, porque si la gente no puede venir, no vendes, pero por el facebook, el WhatsApp, a través del teléfono, la gente nos decía la planta que quería y se la mandábamos a casa, nos ha desbordado a todos», incidió.

Si bien Alberola admite que, con la actual coyuntura provocada por el coronavirus, el futuro es una incógnita -«no tengo ni idea de lo que va a pasar a partir de ahora», comenta-, señala que, al menos en su caso, las semanas del confinamiento han sido buenas para el negocio. «Las ventas presenciales entre los agricultores que venían con todo el cuidado y nuestro servicio a domicilio, diría que se han mantenido, mientras que las ventas virtuales sí han subido». Este vivero ubicado en la carretera de la Pobla Llarga a Villanueva de Castellón produce frutales en maceta y comercializa tanto plantas ornamentales como hortícolas.

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