Las mascarillas quirúrgicas e higiénicas tienen una vida útil de entre 4 y 8 horas y, a la hora de conservarlas para un segundo uso, deben guardarse en una bolsa transpirable o un sobre de papel, pero nunca en el bolso o bolsillo, ya que son un vector de contaminación. Así lo recomiendan la Organización Colegial de Enfermería, que ha publicado una infografía y un vídeo animado con los principales consejos.