El teniente general Fernando Santafé, valenciano y número tres en la cúpula de la Guardia Civil, ha sido cesado horas después de que Marlaska destituyera al teniente coronel Diego Pérez de los Cobos, lo que agrava la crisis dentro del Ministerio del Interior.

Fuentes conocedoras de lo ocurrido aseguran que el ministro ha cesado a Santafé, nacido en Bétera y con una carrera intachable dentro del Instituto Armado, tras la última convulsión en la cúpula de la Guardia Civil, a raíz de la investigación contra el delegado del Gobierno en Madrid por la celebración del 8M. Esa investigación ha sido llevada a cabo por la Comandancia de Madrid y se sustancia en un informe ampliamente criticado por su aparente parcialidad.

En todo caso, la renuncia del jefe de Santafé y máximo responsable no político del cuerpo, el hasta esta semana director adjunto operativo (DAO, el teniente general Laurentino Ceña, tras la destitución del coronel jefe de la Comandancia de Madrid, el también valenciano Diego Pérez de los Cobos tras el citado informe polémico, ha precipitado también el cese de Santafé por su apoyo a ambos.

En este caso, han sido los modos y no el fondo lo que ha generado malestar en la cúpula de la Guardia Civil, donde los tres defenestrados se habían ganado una merecida fama de profesionales intachables en su dilatada carrera profesiona.

De hecho, fuentes conocedoras de lo sucedido sitúan la socorrida "pérdida de confianza" alegada por el ministro Fernando Grande-Marlaska para cesar a Pérez de los Cobos en que no informó a sus superiores de la naturaleza del informe que elaboraron su capitán y su teniente de Policía Judicial más que en su contenido en sí, aunque también, dado el sesgo del mismo.

Precisamente por haber sacrificado a un hombre de gran prestigio dentro del Cuerpo, que había sobrevivido a varios cambios de Gobierno, el DAO presentó su renuncia a cinco días de su jubilación. Y detrás ha ido Santafé, que según esas mismas fuentes no presentó su renuncia sino que fue cesado por la misma razón: discutir las formas y mostrat su apoyo a ambos profesionales.

En todo caso, Fernando Santafé, que este sábado cumple 64 años, por lo que aún le queda un año para su jubilación, estaba abocado a la renuncia al cargo de no haber sido cesado, ya que el ministro del Interior le había colocado como mando inmediatamente superior a un general de rango inferior (él es teniente generañ, el máximo empleo dentro del cuerpo), algo completamente inviable en la Guardia Civil, donde la jefatura solo la puede detentar alguien del mismo rango y más antiguo que el subordinado. Santafé era (y es) el teniente general más antiguo después de Ceña, por lo que, habiendo dejado el cargo este, Santafé era el único DAO posible.

Se da la circunstancia de los dos tenientes generales, Ceña y Santafé, han superado la covid-19 tras haberse contagiado en las primeras semanas posteriores a la declaración del estado de alarma. El valenciano ha tenido que permanecer un mes en aislamiento en su vivienda de Madrid, aunque pasó la enfermedad con síntomas leves y se encuentra en perfecto estado de salud. De hecho, no ha dejado de atender sus quehaceres profesionales en todo este tiempo.

Sustituido

Tras su cese, el ministro ha propuesto para suceder a Santafé al general de división Félix Blázquez González, como nuevo Mando de Operaciones de la Guardia Civil, a todos los efectos el número 3 del instituto armado.

Según el Ministerio, Marlaska ha convenido con la ministra de Defensa, Margarita Robles, el ascenso a teniente general del general de división Félix Blázquez, que será nombrado jefe del Mando de Operaciones de la Dirección Ajunta Operativa de la Guardia Civil.

El General Blázquez era hasta ahora Autoridad Nacional de Coordinación de las actuaciones para hacer frente a la inmigración irregular en la zona del Estrecho de Gibraltar, mar de Alborán y aguas adyacentes.

La propuesta de este nuevo empleo y destino para el general Blázquez se suma a la realizada en el día de ayer para el general Pablo Salas como Director Adjunto Operativo del Cuerpo y se enmarcan "en el nuevo impulso" que "se le quiere dar a la Guardia Civil ante los restos de la seguridad del siglo XXI".

La propuesta del general Blázquez para asumir el Mando de Operaciones supone el cese en el mismo del teniente general Fernando Santafé Soler, quien será propuesto para ocupar un nuevo destino en la Dirección del Centro Universitario de la Guardia Civil.

Mientras se produce este nombramiento, Santafé "estará encuadrado administrativamente en el Ministerio del Interior, en una plaza acorde a su categoría", subraya la nota.