Varios momentos en el pleno de las Corts, que esta semana se celebra en sesión triple, evidencian que el giro político en Ciudadanos en busca del centro político empieza a consolidarse. Un nuevo estilo que llega de Madrid, donde Cs ha dado apoyo al Gobierno para prorrogar el estado de alarma y se ha desmarcado de Vox y PP, con un discurso que marca distancias con la ultraderecha y al mismo tiempo combina el azote a la izquierda gobernante con la capacidad para lograr acuerdos con ella.

A escala valenciana, Cs no solo marcó distancias ayer con Vox sino que se le encaró de tal forma que el diputado Fernando Llopis llegó a acusar a este partido de no tener argumentos, de criticar mucho y trabajar poco y hasta recordó que en los últimos presupuestos no presentaron ni una enmienda.

«Lo último que me vería yo es formando parte de Vox; critiquen menos y trabajen más, a mí me puede criticar si trabaja, pero no cuando no tiene argumentos y no trabaja», le soltó Llopis a una diputada de la bancada ultra. Hasta el PP reprochó a Cs que sume «a la fiesta del Botànic».

Además, en las sesiones que se han celebrado esta semana, el partido de Toni Cantó (que ya pactó hace unos días con el Botànic su entrada en la Mesa de la comisión de reconstrucción, de la que PP y Vox quedaron fuera; y recientemente se sumó al gobierno del PSPV en Torrent) vio como el Botànic le apoyaba una propuesta para la mejora de la sanidad valenciana. Cs también se sumaba a otra iniciativa de la izquierda que reclamaba políticas a la UE en favor de una mutualización de la deuda de todos los países, los llamados 'eurobonos'. También coincidieron los naranjas con el Botànic en la necesidad de exigir medidas de liquidez al Gobierno para que la Generalitat pueda hacer frente a la emergencia sanitaria y a las necesidades económicas y sociales de los próximos meses, una propuesta a la que también se suma el PP con el rechazo de Vox. La medida plantea incluso la posibilidad de déficits asimétricos para las autonomías, algo a lo que hasta ahora siempre ha sido reacio Cs.

Insisten en que son de centro

En cambio, Cs, cuya diputada María Quiles insistió varias veces ayer en el pleno que el suyo es un partido de centro, rechazó una propuesta del Botànic para blindar la inversión en servicios públicos sin recortes y una reforma tributaria que aumente la aportación de las grandes fortunas, en un debate en el que el diputado Luis Arquillos dijo que el Consell ha abandonado y tratado de forma infame a los profesiones sanitarios durante la pandemia. Ciudadanos también se sumó a una propuesta de Vox para que los no nacidos computen en el núcleo familiar durante el embarazo para la admisión en centros educativos y matrícula. En esta iniciativa el PP reprochó a Vox que plagie propuestas suyas.

El PP sale en defensa de Baldoví

En la propuesta que exigía al Gobierno más liquidez el PP empleó buena parte de su tiempo en defender al diputado de Compromís Joan Baldoví y cargar las tintas contra la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. En opinión del diputado Rubén Ibáñez, Compromís apenas ha defendido a Baldoví cuando la ministra le pidió no inventar problemas. «Baldo, no estás solo», dijo Ibáñez que incluso le dejó una bolsa de tila a Fran Ferri, que intervenía después, recordando la intervención de Baldoví cuando se la recetó a la derecha.