La eurodiputada del PSPV-PSOE Inmaculada Rodríguez-Piñero celebra que la Comisión Europa haya presentado un programa de reconstrucción ambicioso e histórico que permitirá que la UE salga fortalecida: «Ante una crisis sin precedentes, Europa debía dar una respuesta histórica y la ha dado». En clave valenciana, apunta como objetivo que la Comunitat obtenga los mayores recursos posibles de los destinados a España y pueda avanzar hacia una sociedad y un modelo productivo «más digitalizado, innovador, competitivo y, sobre todo, más resiliente ante futuras crisis».

Según la propuesta de Bruselas, que debe ser discutida por los jefes de Estado y de Gobierno y acordada con el Europarlamento, España tendría acceso a 140.446 millones del fondo de recuperación para relanzar la economía tras la pandemia, de los que 77.324 llegarían a través de transferencias directas y el resto como préstamos a devolver. La socialista defiende que es el momento de que el Consejo también acepte este plan basado en la sostenibilidad del medio ambiente, la transformación digital de las economías y la mejora de la competitividad ante un mundo cambiante que necesitamos repensar.

Aprender del pasado

En un comunicado, destaca el programa por su elevada cifra nunca vista en los recursos propios y el presupuesto de la UE y porque contempla por primera vez la mutualización de la deuda. «Ahora tenemos la oportunidad de cambiar el futuro de la Unión Europea, aprender de las lecciones del pasado y reconocer que ante las crisis no hay más salida que la inversión y la solidaridad frente los recortes y la austeridad». A su juicio, la propuesta ha sido posible gracias al mensaje alto y contundente que lanzaron los eurodiputados al pedir un plan potente que fuera financiado con el esfuerzo de todos los estados para apoyar los sistemas sanitarios y las economías.

Sin embargo, Piñero advierte que las dudas que el plan provoca entre algunos países pueden poner en peligro algo que ayudará a ser más competitivos y a no depender como hasta ahora de terceros países para cuestiones tan básicas como unas mascarillas o el paracetamol. «Es inconcebible que ante la crisis actual aún haya países que consideren que la salida a esta pandemia debe producirse en clave nacional, cuando esta crisis nos afecta a todos y su respuesta debe ser global», dice.

Y reivindica que de esta crisis saldrán todos los países europeos unidos o no saldrá ninguno, tras agradecer que el plan haya incorporado a sus prioridades de inversión varias exigencias socialistas.