Tavernes de la Valldigna ha sido, con trece fallecidos y 41 infectados, la localidad de la comarca de la Safor con mayor incidencia de pandemia del coronavirus. Según reveló ayer la Conselleria de Sanidad al publicar el número de infectados y de fallecidos municipio a municipio, la población vallera ha sido, con diferencia, la más golpeada.

Además, esa situación se ha mantenido desde el inicio de la crisis y así sigue en este momento, algo a lo que ha contribuido el foco que se detectó en una residencia de personas mayores situada en este término.

La residencia, donde se produjeron varios fallecidos, estuvo durante semanas en el punto de mira de las autoridades sanitarias para tratar de contenerla y evitar la propagación. Esa vigilancia, que también incluyó la desinfección del local por parte de unidades del Ejército, todavía se mantiene.

En concreto en Tavernes de la Valldigna, con una población cercana a los 17.000 habitantes y sus 41 casos, se ha contabilizado un infectado por cada 414 personas. En los últimos 14 días solo ha habido tres infectados detectados. En comparación, la ciudad de Gandia, con 74.000 habitantes, ha registrado un infectado por cada 900 ciudadanos, y en el caso de Oliva, con 18 infectados, esa proporción se eleva a uno por cada 1.300 habitantes.

Los datos de la Generalitat arrojan que en el conjunto de la Safor los fallecimientos por coronavirus ascienden a 27 personas, una más si se cuenta el conjunto del Área de Salud de Gandia, y 190 infectados confirmados. Afortunadamente, la evolución de la pandemia va en positivo y de todos los diagnosticados solo seis se han revelado en los últimos catorce días, un dato todavía más esperanzador si se tiene en cuenta que ahora se están realizando muchos más test que al inicio de la propagación del virus.

Del total de 31 municipios de la Safor, que suman unos 170.000 habitantes censados, 8 tienen personas fallecidas. Se trata de Ador, Daimús, el Real de Gandia, Oliva, Rafelcofer, Simat de la Valldigna, Tavernes de la Valldigna y Gandia. En el resto no ha habido muertos por esta pandemia.

Sin ingresados en el hospital

Como en el resto de la Comunitat Valenciana, el momento de mayor presión se produjo al principio de la pandemia, mientras que en las últimas semanas la evolución ha sido claramente descendente. De hecho, hace días que en el hospital comarcal Francesc de Borja no hay personas ingresadas, aunque sí que existen positivos que cumplen cuarentena en casa.

De la misma manera, nunca se han tenido que utilizar la totalidad de las camas de UCI que el hospital preparó cuando la crisis sanitaria registraba incrementos muy preocupantes de nuevos infectados.

La Safor ha estado siempre en niveles de incidencia por debajo de la media de la Comunitat Valenciana, algo a lo que contribuyó la rápida actuación de las instituciones, incluyendo ayuntamientos que, como Gandia y Oliva, blindaron enseguida las residencias de personas mayores.