El panorama en las residencias de mayores de la Comunitat Valenciana ha cambiado considerablemente en el último mes, y como si de un paciente se tratara, puede decirse que «evoluciona favorablemente». Así lo demuestran las últimas cifras de contagios y residentes fallecidos de las que dispone la Fiscalía de València. De hecho, en el último informe remitido a la Fiscalía General por parte de la sección de Civil de la fiscalía valenciana, que se preocupa por velar por la seguridad y necesidades de este colectivo tan vulnerable y que se ha visto tan perjudicado por el coronavirus, se observa que las cifras de muertes en centros sociosanitarios han disminuido cerca de un 88 por ciento desde principios de mayo.

En la última semana el número de residentes fallecidos han sido siete, muy lejos de las cifras de la primera semana de mayo cuando se contabilizaron unas 60 muertes semanales de ancianos procedentes de residencias. «Después de una carencia absoluta de medios de protección en las primeras semanas de la pandemia, ya se empieza a ver la luz al final del túnel, porque realmente en las residencias lo han pasado muy mal», asegura la fiscal coordinadora de la sección de Civil de Valencia, Ana Lanuza.

Esta mejoría y disminución en el número de muertes y contagios se debe en buena parte a la realización de test masivos, los cuales aportan «una información muy valiosa de la que antes no se disponía», según remarca Lanuza, para poder evitar nuevos contagios y aislar debidamente a los residentes que han dado positivo.

Ahora mismo se están haciendo pruebas a todos los residentes cada semana y a trabajadores cada quince días. Estos test, que durante muchas semanas solo se hicieron a pacientes con sintomatología, han permitido detectar que había muchos ancianos asintomáticos, lo que suponía un riesgo añadido hacia el resto al poder contagiar el virus sin ser conscientes de ello y sin contar con las medidas de aislamiento oportunas.

La cifra de residentes fallecidos desde que comenzara la pandemia es de 530 personas, siete de ellos la última semana, frente a los 20 de la anterior y los 60 que se registraron a principios de mes. En total se han visto afectadas por el coronavirus a lo largo de estos meses y en distinto grado -algunas con decenas de fallecidos y otras con solo un caso de contagio- 181 residencias de la Comunitat, de las cuales cien son de la provincia de Valencia, 59 de Alicante y 22 de Castelló.

Asimismo, en 81 de estos centros se ha producido al menos un deceso por Covid-19. Concretamente en la provincia de Valencia 51 residencias han sufrido la pérdida de uno de sus residentes por las patologías agravadas por el coronavirus.

En estos momentos la sección Civil de la Fiscalía de Valencia mantiene abiertas 19 diligencias preprocesales en residencias con más de una decena de muertes, aunque dos de ellas se van a archivar al no haberse producido ningún contagio ni fallecido más en las últimas semanas, y se van a abrir diligencias en otra más.

Todavía ha casos positivos por Covid-19 en 73 centros, 34 de ellos en la provincia de Valencia, 31 en Alicante y ocho en Castelló. Asimismo, según datos de Sanitat, en las últimas horas habrían fallecido dos residentes más y se han producido sendos contagios, uno de ellos un trabajador. También se encuentran bajo vigilancia activa de control sanitario 28 residencias en la Comunitat, trece ellas en la provincia de Valencia.

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