El ministro José Luis Escrivá insistió ayer en que a partir de 2021 estudiarán acuerdos con otras comunidades similares al alcanzado con Navarra y País Vasco para la gestión de la renta mínima vital, pero los descartó ahora, como pide la vicepresidenta valenciana, por la urgencia de desplegar la prestación en todo el territorio y cuestionó la eficacia de algunas autonomías para poder hacerlo. Oltra, por su parte, defendió la gestión de la Renta Valenciana de Inclusión, para la que destina más de 229 millones, un 1.000 % más que en 2015.