Más allá de la crisis que se cierne sobre la industria aérea, con compañías pendientes de ayudas estatales y de una reestructuración por la inevitable caída de la demanda, lo cierto es que, a corto plazo, el drama de la pérdida de conectividad para ciudades y destinos va a ser menor del que se temía.

En estos momentos, la buena noticia para el aeropuerto de València, es decir, para sus ciudadanos, su sector turístico y empresarial, es que se va a recuperar buena parte de la conectividad desde el minuto cero. Es decir, desde el 1 de julio, cuando el Gobierno levanta la cuarentena obligatoria para los viajeros que lleguen desde fuera, aunque este junio muchas aerolíneas ya empiezan a volar. Lo que vendrá más adelante dependerá del comportamiento de la demanda tras el fin de las restricciones.

Por ahora, y según los planes hecho públicos por las aerolíneas para el mes de julio, València va a tener conexión con 18 países, aunque obviamente cae el número de frecuencias, ante la incerteza del turismo.

Hoy por hoy, la ciudad tiene aseguradas para el próximo mes 78 conexiones, entre nacionales, europeos y del norte de África, según la información recopilada por la oficina municipal Visit València. Es una cantidad menor que lo que se esperaba para este verano de récord antes de que todo saltara por los aires, pero es una cantidad notable si se tienen en cuenta los nefastos presagios de las primeras semanas de pandemia. Solo un dato: según el INE, este pasado abril han venido a España cero viajeros. El turismo desapareció. Desde esa realidad, las noticias para el aeropuerto son esperanzadoras.

Así, por ejemplo, en lo que respecta a Europa, València arrancará julio con al menos 53 conexiones en 43 ciudades y 18 países, con 147 vuelos semanales. Antes de la pandemia, estaban previstas 91 conexiones con 65 ciudades de 22 países, con lo que a falta de un mes para el inicio de la 'nueva normalidad', ya se ha recuperado el 60% de la conectividad internacional. Dentro de España, julio arrancará como mínimo con 25 rutas con 12 aeropuertos.

Ryanair, el gran operador en Manises, retomará casi toda su operativa, lo que garantiza una gran conectividad con toda Italia. Como Vueling, que este mes de julio ya arrancará con nueve rutas, entre ellas Amsterdam, París o Roma, y que aumentarán en agosto.

Capitales 'perdidas'

Por el camino, lógicamente, se 'pierden' ciudades. Brussels, del grupo Lufthansa, canceló hace semanas la ruta que iba a inaugurar entre València y la capital belga. Nada se sabe tampoco de las rutas a Granada, Almería y Pamplona que había anunciado Air Nostrum hace unos meses como novedades del verano. Del mismo modo, para julio tampoco hay noticias aún de vuelos a Moscú, Praga, Lisboa, Rotterdam, Burdeos o Lyon.

Sin embargo, también ha habido sorpresas. Por el camino han aparecido conexiones con las que no se contaban y que probablemente responden a los cambios de planificación de muchas compañías fruto del reordenamiento general del tablero de operaciones.

Así, por ejemplo, Wizz Air va a unir València a Milán Malpensa, donde pierde fuelle Alitalia. O la española Volotea, por ejemplo, que entra a volar en las rutas a Mallorca, Menorca o Bilbao, en las que nunca había operado. Con Bilbao, de hecho, va a haber en julio hasta tres transportistas, ya que Vueling y Air Nostrum también competirán.

En cuanto a las comunicaciones con capitales españolas, obviamente habrá un tráfico considerable hacia Baleares y Canarias. Pero también se mantienen conexiones con destinos como Sevilla, Santander o Madrid desde julio.

En este sentido, resulta reseñable un informe encargado por Renfe y que señala que, para movimientos domésticos, el tren puede 'robar' al medio aéreo hasta 3,4 millones de viajes, aunque también pasarán años hasta que se recupere, en 2023, el nivel de pasajeros previo a la actual crisis sanitaria y económico.

Pendientes de los 'hub'

En cualquier caso, dada la particularidad de la situación, la planificación aérea para este verano todavía no está clara. Es una foto en movimiento y se espera en los próximos días los grandes grupos muevan ficha. Y es que todavía se desconocen con certeza los planes para València de KLM-Air France y la filial Transavia, British Airways (IAG), EasyJet o Turkish Airlines, entre otros. No es una cuestión menor. Aunque la conectividad de la capital con las principales ciudades está asegurada, sin estas grandes aerolíneas queda coja la conectividad de largo radio. Se trata de las compañías que unen ciudades medianas como València con los grandes aeropuertos internacionales ( hub), como Amsterdam, Frankfurt, Munich, Paris CDG o Londres Heathrow, de donde salen los vuelos intercontinentales hacia América o Asia.

La incertidumbre para los vuelos lejanos tardará más en despejarse ya que la pandemia avanza a diferentes velocidades en cada región del planeta. Con la capital de Reino Unido, por citar un caso, de momento solo se podría volar en julio a Stansted con Ryanair, cuando en los mejores momentos se ha podido viajar a cuatro aeropuertos.