El Gobierno ha respondido esta vez afirmativamente a todas las peticiones de cambio de fase que le han formulado los responsables autonómicos. Madrid, el área metropolitana de Barcelona, la región sanitaria de Lleida y toda Castilla y León pasarán a la fase 2 de la desescalada a partir de este lunes 8 de junio. Más de la mitad de la población española entrará el mismo día en la fase 3, en la que todas las decisiones dependerán del ejecutivo autonómico. La única región que no se mueve de fase es de la Comunitat Valenciana, que permacerá una semana más en la fase 2 a petición propia.

La situación controlada de la epidemia y el refuerzo de los distintos sistemas sanitarios han llevado a esta decisión, según el Ministerio de Sanidad, lo que no es obstáculo para que se mantengan las cautelas. «Estamos en la fase final de la epidemia pero todavía estamos en la desescalada, lo que requiere mantener la máxima tensión», advirtió el titular del departamento, Salvador Illa.

El pase a la fase 3 es un salto cualitativo muy importante. Se podrá viajar entre las provincias que se encuentren en esta fase, si así lo deciden las autoridades autonómicas, algunas de las cuales, como Andalucía, ya estudian hacerlo de modo inmediato. Lo que no podrán es viajar a otras autonomías aunque éstas se hallen también en la tercera etapa, como dejó claro Illa en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

La facultad más importante que adquieren las autoridades autonómicas, sin embargo, es la de establecer el momento en que accederán a la «nueva normalidad». Si las dos comunidades que más dependen del turismo, Canarias y Baleares quieren, podrían dejar a atrás de la fase 3 en una semana. En cualquier caso, este paso deberá ser refrendado por el Ministerio de Sanidad, como ayer aclararon tanto Illa como Simón.

Solo una semana en fase 2

Además de estas cinco autonomías, entrarán en la fase 3 La Rioja, Asturias, Cantabria, Extremadura, Murcia, Navarra, Cuenca, Guadalajara, Melilla y en Cataluña, el Alt Pirineu i Aran, Terres de l'Ebre y Camp de Tarragona. En el caso de Andalucía se da la circunstancia de que Granada y Málaga han pasado sólo una semana en la fase 2, debido a su «buena situación sanitaria», según explicó el ministro.