Que la crisis de la covid-19 iba a asestarle un duro golpe al transporte público es algo que ya pronosticaron todos los expertos y que, con la desescalada, se está confirmando dada la lenta recuperación de la cifra de viajeros de los distintos modos. Seguramente hasta 2021 los servicios de autobús, metro o cercanías no recuperarán la normalidad prepandemia, aunque un rebrote del virus podría alargar la larga crisis a la que se enfrenta el sector.
Desde ayer, tras una nueva orden ministerial, los distintos modos de transporte ya pueden poner a disposición de los usuarios la totalidad de los asientos disponibles en cada uno de sus convoyes, mientras que se mantiene la limitación de dos personas de pie por metro cuadrado.
Reservas por la mascarilla
Desde el pase a la fase 2 de desescalada, tanto bus, metro o cercanías están ya operando prácticamente con el cien por ciento de su servicio habitual, es decir, el que ofrecían antes de la crisis. La diferencia es que ahora los convoyes no van llenos. Muchas personas aún tienen reservas a la hora de subir al bus, metro o tren, a pesar de las medidas de seguridad están garantizadas. El uso obligatorio de la mascarilla es una barrera psicológica difícil de superar todavía.
Con la posibilidad de ofertar todas las plazas disponibles sentadas, un bus normal de EMT València ofrece entre las 45 plazas para los convoyes convencionales y las 70 de uno articulado. En Cercanías Renfe, por ejemplo, se estaban ofreciendo hasta el pasado fin de semana 260 plazas por tren, y ahora ya han aumentado hasta las 360.
EMT asegura que prácticamente todas las líneas principales están operando ya al cien por ciento de su servicio habitual, tanto en número de convoyes como de frecuencias, aunque otras líneas con menos demanda varían entre el 80 y 100 %. Desde Metrovalència explican que desde el 11 de mayo pasado también se recuperaron los horarios y las frecuencias habituales, aunque en el servicio de tranvía, cuyo principal pasaje son estudiantes, tiene una oferta más reducida para adaptarla a la demanda actual. En Cercanías Renfe también explican que se ofrece ya todo el servicio anterior a la crisis.
Si ponemos números a las cifras de viajeros, es cuando se constata el mal momento para el transporte colectivo de viajeros. Por ejemplo, en el cambio de fase 1 a 2 en València, EMT registró 100.923 viajes el 1 de junio, frente a los 79.904 del 25 de mayo y los 67.286 del 18 de mayo. Aunque la cifra indica un fuerte crecimiento, todavía está muy lejos de los niveles de un lunes laborable estándar, con unas 330.000 validaciones diarias.
«Realmente esta orden ministerial no cambia mucho las cosas porque ya se ofrecían muchas más plazas de las que utilizaban los usuarios. Donde habrá un repunte de viajeros serán cuando volvamos a cambiar de fase», apuntaban fuentes de Metrovalencia. Así, el número de personas que usaron Metrovalencia (metro y tranvía) el domingo 7 de junio fue de 27.134 viajeros, un 30,18% más que el domingo 31 de mayo cuando se registraron 20.844 viajeros, pero un 88,36% menos que el mismo día de 2019 que fue viernes, o un 69,33% menos que un domingo tipo, como el 9 de junio.
En cuanto al servicio de Cercanías de Renfe, los datos están en consonancia. El viernes pasado, última cifra disponible, se registraron unos 17.000 viajeros, pero fue un 67 % menos que, por ejemplo, el viernes 13 de marzo, con 55.000. Durante la fase más estricta del estado de alarma los viajeros cayeron a solo mil diarios.
Desde ayer, los trenes pueden acoger a un máximo de 360 personas, aunque la cifra más alta registrada hasta la fecha fueron 136 personas en el convoy de hora punta de Castelló a València.
Tres millones de la conselleria de España para paliar pérdidas
El conseller de Movilidad, Arcadi España, anunció ayer una partida de 3 millones de la Generalitat para ayudar a las empresas concesionarias de servicios públicos de transporte regular de personas por carreteras a compensar las pérdidas que la crisis sanitaria ha ocasionado en el sector. España, además, calificó de «buena noticia»" los 800 millones que destinará el Gobierno central a las autonomías para el sector del transportes e indicó que se usará «para financiar el transporte público ante la caída de la demanda y la necesidad de contar con medios de transporte público seguros, tanto ferroviario como de transporte de viajeros por carretera».
Por otra parte, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) reactivó ayer los procesos selectivos para los ingresos derivados de las Ofertas de Empleo Público de FGV de los años 2017, 2018 y 2019 y para la constitución de nuevas bolsas de empleo temporal, cuyas bases se publicaron en febrero del presente año en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) pero que se tuvieron que aplazar.
con motivo de la crisis sanitaria y el estado de alarma por el coronavirus. Debido a la situación actual y a las recomendaciones sanitarias por la crisis, se producirán algunos cambios, como que la inscripción se realice únicamente de forma telemática, eliminando la posibilidad de hacerlo de forma presencial en papel como estaba previsto en un principio. A la oferta de 106 plazas correspondiente a 2019, hay que sumar las 15 plazas de 2018 y las 15 de 2017, por lo que FGV lanzará un proceso de selección conjunto en 2020 para un total de 136 puestos de trabajo para Valencia y Alicante. FGV ha reservado un mínimo exigido por ley de un 7 % para personas con diversidad funcional física.
