Los precios de los apartamentos para este verano han caído entre un 10 y un 20 % en Cullera, Gandia, Dénia y Oliva por la falta de demanda, según la tasadora TecniTasa. Los propietarios se han visto obligados a bajar las rentas tras el parón de las reservas. Fuentes de la tasadora explicaron que el nivel de reservas en algunas zonas turísticas es bajo por la incertidumbre generada por la pandemia y precisaron que una parte importante de los alquileres estivales se suele cerrar en Semana Santa y «este año el mercado ha estado completamente parado por el confinamiento». Este verano es posible alojarse en la Marina Alta una semana en primera línea de playa por entre 400 y 500 euros. La zona más económica de la Comunitat Valenciana es El Saler con apartamentos a 380 euros la semana y la más cara Benidorm con inmuebles de 60 metros cuadrados a 1.490 euros.
Eduardo Vercher, delegado de TecniTasa en el sur de Valencia y el norte de Alicante, incidió en que este verano hay mucha oferta de apartamentos y poca demanda en su área de trabajo. «Hay mucha incertidumbre porque la gente no sabe si se va a poder desplazar o se producirá un rebrote y el Gobierno restringirá la movilidad. Es un verano atípico». Vercher destacó que «las reservas se cierran en Semana Santa y este año no se han hecho». El tasador cree que si se produce un repunte de la demanda a última hora «será de baja intensidad porque mucha gente ha renunciado este año a tener vacaciones», aunque advirtió de que los precios ya no van a caer más.
Los descuentos alcanzan el 20 % en apartamentos en primera línea de playa en Xàbia, Dénia o Calp con ofertas que rondan los cuatrocientos o quinientos euros la semana en los tres casos. En la plataforma de reservas Booking era posible alquilar ayer por la tarde un alojamiento para dos adultos y dos niños en Calp por 486 euros o un apartamento en Dénia por 483 euros para la segunda semana de julio. El informe de TecniTasa apunta que también se pueden arrendar pisos de 70 metros cuadrados junto a la playa de Dénia o Calp por 450 euros semanales. En Gandia hay viviendas de 80 metros cuadrados en primera línea por 450 euros a la semana, en Oliva por 500 euros y en Cullera por 475 euros. Sin embargo, la opción más económica es El Saler donde hay pisos de 110 metros cuadrados a la semana por 380 euros tas registrar una caída del precio del 2 %.
No todo son bajadas, otros destinos turísticos de la Comunitat Valenciana han experimentado subidas de hasta el 20 %. El ejemplo más evidente es Benidorm donde un apartamento de 60 metros cuadrados cuesta en julio 1.490 euros a la semana. La segunda zona valenciana más cara para alquilar un apartamento este verano es Pilar de la Horadada con apartamentos de 80 metros cuadrados en La Torre por 1.110 euros a la semana.
La Patacona, por las nubes
Los apartamentos también han subido entre un 10 y un 20 % en la Patacona con precios que rondan los 780 euros a la semana por un inmueble de 90 metros cuadrados y en El Puig con viviendas de 80 metros cuadrados por 610 euros, según recoge el informe de la tasadora TecniTasa. En Canet de Berenguer y la Pobla de Farnals los precios de los alojamientos turísticos también se han incrementado entre un 10 y un 20 % por la demanda de ciudadanos de València que han decidido este año no salir de la provincia por la incertidumbre existente con el coronavirus.
A nivel nacional, las Islas Baleares siguen siendo uno de los destinos más caros. Los apartamentos en Punta Prima en Menorca (2.800 euros a la semana), Port d'Alcúdia o Puerto de Ibiza (2.200 euros) o una urbanización en Sa Rapita (2.000 euros) copan los precios más altos en Baleares. Otros destinos caros son Puerto Banús (2.600 euros) o Marbella donde un apartamento en el centro ronda los 1.500 euros semanales.
Mucho más barato es alojarse en las Islas Canarias donde se pueden conseguir pequeños apartamentos por 275 euros semanales en la playa de las Canteras en Las Palmas o en El Puerto de la Cruz en Tenerife.
