En poco menos de un mes el PP provincial ha pasado de ser un campo de minas con al menos media docena de aspirantes a convertirse en un partido en el que se cierra filas. El efecto balsámico fue la decisión hace tres semanas de la dirección nacional de señalar a un candidato (el diputado provincial y alcalde de Gavarda, Vicent Mompó) y de la dirección regional de acatarla. Despejado el camino y con la retirada la semana pasada de Juan Vicente Pérez (el único que públicamente había comunicado su intención de ser candidato a presidir el partido), el Comité Organizador del Congreso provincial confirmó ayer lo que ya se daba por hecho: solo Mompó opta a la presidencia por lo que se convierte de facto en el nuevo líder provincial. Eso sí, Mompó, que venía avalado por el diputado nacional y expresidente provincial, Vicente Betoret, considerado crítico a la dirección regional del PPCV, hizo ayer una demostración de fuerza al presentar 4.100 avales a su candidatura. Sólo necesitaba 75 y sabía que no tendría rival, pero con esta cantidad de apoyos, el aún precandidato lanza el mensaje de unidad que tanto necesita el PP provincial.
Mompó competirá consigo mismo ya que los nuevos estatutos del PP fijan un sistema de primaras con doble urna. Y esa será a corto plazo su primera prueba de fuego: lograr una participación digna el día 29. Los avales ya apuntan más o menos los respaldos que podrá sumar. Sobre un censo que viene hinchado desde la época de Zaplana y que el PP cifra en 50.000 militantes, los 4.100 apoyos pueden parecer poco, pero no lo son. La presidenta del PP, Isabel Bonig, obtuvo en sus primarias 6.824 votos de toda la Comunitat, de los que 3.157 fueron de la provincia de València. Seguramente no todos los avalistas de Mompó votarán después, pero estas primarias servirán para depurar por fin el censo, ya que el COC ha decidido que todos aquellos que paguen las cuota serán potenciales inscritos para votar. Hasta el día 25 hay de plazo para que el COC revise tanto los avales como el pago de cuotas. Será entonces cuando se sepa realmente el censo potencial de votantes.
El día de la votación (que será presencial en las sedes del partido) también se habilitará una segunda urna cuyo objetivo es elegir a los compromisarios que irán al congreso previsto para el 25 de julio: hay plaza para unos 2.800.
