La Generalitat aprobó ayer el anteproyecto de ley que regula las profesiones del deporte en la Comunitat Valenciana, determina las cualificaciones y titulaciones necesarias y atribuye a cada una su ámbito. Incluye cinco categorías: monitor deportivo, entrenador, preparador físico, director deportivo y profesor de Educación Física.

La norma, anunciada por el conseller de Deporte, Vicent Marzà, pretende poner en valor a estos trabajadores y garantizar la máxima seguridad a los usuarios. «Hoy es un día muy importante que hace justicia a los miles de profesionales del deporte», celebró en rueda de prensa tras el pleno semanal.

El anteproyecto parte de la ley valenciana del deporte de 2011 que ya recogía la necesidad de ordenar estas profesiones. Además de la titulación, regula la posibilidad de reconocer las competencias profesionales adquiridas por experiencia laboral y la formación no formal.

Garantía de formación adecuada

Esto permitirá obtener el certificado de profesionalidad correspondiente o convalidar los módulos de los títulos de ciclos formativos determinados. A partir de la aprobación de la norma se establecerá un periodo de transición para que los profesionales puedan adaptarse a los requisitos.

En todo caso, el titular de Deporte ha asegurado que la «inmensa mayoría» de los que trabajan en la Comunitat pueden acreditar estar en condiciones de seguir y ha confiado en que todos los establecimientos puedan garantizar que su plantilla está cualificada. La vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, que compareció en rueda de prensa para explicar los acuerdos aprobados por el Gobierno valenciano, indicó que se trata de «garantizar que los servicios deportivos y de actividad física se realizan y prestan de forma segura y que estén impartidos o dirigidos por profesionales con la adecuada formación».

De este modo, según resaltó la vicepresidenta, la norma «establece la obligación de una publicidad objetiva, prudente y veraz de los servicios ofrecidos y se prohíbe el fomento de prácticas deportivas perjudiciales para la salud», al tiempo que «los centros deportivos han de mostrar, de una manera clara y visible, la titulación que posean los y las profesionales».