La conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática ha iniciado los trabajos de exhumación de una fosa común en el cementerio de Castelló, donde están enterrados los restos de ocho represaliados por el franquismo, entre ellos dos alcaldes. Los trabajos, los primeros que realiza directamente la Generalitat, se prolongarán durante unos veinte días y costarán 15.730 euros. Los expertos han descubierto que cinco de las víctimas fueron fusiladas, dos asesinadas con la practica del garrote vil, y a una tercera se le indujo al suicidio.