La Conselleria de Vivienda y Arquitectura Bioclimática y el Institut Valencià de l'Edificació ha recopilado en la «Guía Verde. Medidas ambientales en la contratación pública en el ámbito de la edificación de la Generalitat» todas las clausulas ambientales y sociales existentes en la legislación actual (autonómica y estatal) para aplicarla tanto en las contrataciones de la Generalitat como en la edificación pública y privada. El documento presentado ayer recoge los criterios ambientales que se pueden aplicar en los concursos de edificación y de obra pública, suministro o concesiones. Aunque el grueso de la «Guía verde» se dedica a recopilar las medidas ambientales en la edificación recogidas en códigos, reglamentos y legislación variada que regula la construcción voluntaria de cubiertas y fachadas vegetales, reutilización de las aguas grises o requisitos como puntos de recarga para vehículos eléctricos en los garajes de nueva construcción o espacios para estacionar bicicletas y patinetes tanto en edificios públicos como privados de nueva construcción, entre muchas otras cuestiones que, en la mayoría de los casos, son voluntarias. «En Alemania y Vitoria se obliga a que todos los edificios tengan cubiertas vegetales. Ahí lo dejo. Es una medida interesante que se debería potenciar más», reivindicó la directora del IVE, Begoña Serrano.

Aunque la importancia de esta guía que recopila y reorganiza toda la legislación vigente (y que no es un documento cerrado ya que se actualizará continuamente) es que ha contado con la colaboración y revisión de los principales actores que han de aplicar la catarata de normativa sobre edificación: fabricantes de azulejos, pinturas, impermeabilización, climatización, yeso, metalurgia, cemento, mueble, madera, hormigón... Y también los colegios profesionales de arquitectos, ingenieros de caminos, de telecomunicación, las Cámaras de Comercio de València y Castelló, los sindicatos CC OO y UGT o empresarios de la CEV, Fevec, Avinco, entre otros. Unas colaboraciones que han sido coordinadas por la directora general de Innovación Ecológica, Nuria Matarredona, y la directora del IVE, Begoña Serrano, junto a un equipo de redacción de profesionales del IVE (Teresa Escrig, Teresa Soto) y de la Generalitat (Olimpia Ferreiro y Julio Lacomba).

No se trata de cuestiones baladís ya que, como recordó la subsecretaria de la vicepresidencia segunda, Blanca Jiménez, «la contratación supone la mitad del gasto público y permite la inserción de aspectos sociales, ambientales y de género» en los concursos y adjudicaciones públicas. «La contratación debe ser una herramienta para transformar la sociedad. Y esta Guía verde se instala en el eje básico del Botànic», defendió la subsecretaria de la conselleria de Hacienda y responsable de la Central de Compras y de la Junta Superior de Contratación Administrativa de la Generalitat, Cristina Moreno.

Por último, el vicepresidente segundo y conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau señaló que la administración «debe de tener un papel ejemplarizante en el desarrollo de sus acciones y de ahí la necesidad de esta guía de medidas medioambientales cuyo objetivo es impulsar una contratación pública más sostenible en consonancia con el contexto de emergencia climática actual. Nos queda mucho por hacer y nos queda muy poco tiempo debido a la emergencia climática», reivindicó.