Las cuatro empresas del grupo empresarial Trasgos Comunicación disfrutaron de un trato de favor del Ayuntamiento de València cuando estaba dirigido por Rita Barberá al lograr un goteo constante de 72 expedientes de contratación entre 1999 y 2013, según ha acreditado la Unidad de delincuencia económica y fiscal (UDEF) de la Policía. Los agentes desgranan en un informe remitido al Juzgado de Instrucción 20, al que ha tenido acceso Levante-EMV, las carambolas que se hicieron durante años para adjudicar todo tipo de contratos a este grupo de empresas de comunicación en los que, señala la UDEF, «se infiere que en la tramitación y adjudicación de estos expedientes se haya podido producir una vulneración de los principios que rigen la contratación pública de publicidad, concurrencia, objetividad y transparencia».
La investigación de la UDEF en Instrucción 20 -abierta tras una denuncia de Compromís cuando estaba en la oposición- acredita que Trasgos se convirtió en el grupo de comunicación fetiche para el Gobierno de Rita Barberá durante catorce años.
Cabe recordar que la empresa Trasgos Comunicación también fue la responsable de la campaña electoral del PP en la ciudad de València de 2011. Una contienda electoral bajo sospecha y que los agentes de la Unidad central operativa (UCO) de la Guardia Civil también han investigado en la pieza del caso Taula que indaga sobre el presunto delito electoral (financiación ilegal) en las campañas electorales de 2007 y 2011.
El juez de Taula no imputó a los administradores de Trasgos porque los delitos que les son atribuibles habían prescrito. Aunque la investigación abierto en Instrucción 20 ambas causas podrían acabar conectadas, según fuentes judiciales.
Por lo que respecta a los contratos desmenuzados por la UDEF para el Juzgado de Instrucción 20, el grupo Trasgos disfrutó de un notable predicamento en nueve concejalías y varias fundaciones municipales. El análisis policial señala presuntas irregularidades en los contratos adjudicados al grupo Trasgos por la Fundación Deportiva Municipal y las concejalías de Deportes (1.511.976 millones), Sanidad, Innovación (267.945,88 euros) y Relaciones Internacionales (69.006 euros). También han aparecido sospechas en contratos del área de Seguridad Ciudadana (265.436 euros), Oficina de Publicidad (376.111 euros), Progreso Humano y Cultura (Banda Municipal) (215.942 euros) y Proyectos Urbanos (83.366 euros). La suma de las contrataciones de estas áreas ascendía a unos 240.000 euros anuales, según refleja la UDEF en su informe. Aunque hubo años como en 2002 (preelectoral) que el grupo Trasgos facturó 431.171, 15 euros (71 millones de pesetas).
Los contratos se repartían entre las cuatro empresas que componen el grupo Trasgos, aunque la matriz era la que se llevaba la palma: Trasgos Comunicación SL facturó 2.157.296,83 euros, Cuco Desarrollo y Comunicación SL un total de 495.212 euros; Construcciones Payá y Montesinos SL 102.194 euros, y Tannhäuser Producciones SL 42.350 euros», según recoge el informe policial.
Los expedientes de contratación han revelado el recurso habitual a «fraccionamiento en contratos menores, adjudicaciones directas, justificación del carácter ineludible del gasto sin que conste la declaración de urgencia» y la concurrencia de varias empresas del grupo Trasgos al mismo concurso o procedimiento negociado convocado por el ayuntamiento.
