El síndic de Ciudadanos en las Corts, Toni Cantó, elevó ayer la presión contra el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, y dijo que «por la cerrazón» de este los municipios alicantinos reciben menos dinero que los del resto de la Comunitat Valenciana.

Tras su visita al Colegio de Médicos de Alicante, el líder de Cs volvió a insistir en su idea de pedir a la diputación que se sume al Fondo de Cooperación del Consell. «Queremos que eso cambie. No estar en este fondo significa que los ayuntamientos de la provincia reciben menos recursos. En estos momentos de crisis es indispensable entrar en el fondo», dijo. Cantó quiso trasladar la unidad del partido y añadió que los dos diputados de Cs que gobiernan con el PP en la institución provincial apoyan su propuesta.

La exigencia del portavoz naranja se produce en un momento de escalada de la tensión con el PP y de distanciamiento de los populares en clave nacional. La alianza puede estar en juego.

En ese contexto de arenas movedizas, ayer se produjo un movimiento en el gobierno municipal, donde CS y PP también gobiernann de la mano, cuya profundidad habrá que calibrar con tiempo.

Un año ha durado Mari Carmen Sánchez como portavoz del bipartito de Alicante. La vicealcaldesa, exsíndica de Cs, deja de ser la voz del equipo de gobierno, un cargo que cada vez ejercía con menor frecuencia. Su puesto lo ocupa a partir de ahora el concejal de Cultura, Antonio Manresa, que hasta ahora era portavoz adjunto de Ciudadanos, puesto que queda en manos de José Luis Berenguer, que era coordinador. Un baile de fichas que supone relegar a la vicealcaldesa y concejala de Turismo. La posición de Sánchez, una vez que Cantó asumió el liderazgo autonómico, ha sido objeto de dudas en más de una ocasión. «Estamos en época de recuperación y Turismo necesita toda su atención», dijo Manresa ayer.