En vísperas de la convocatoria de la Comisión de Seguimiento del Acord del Botànic, la coordinadora autonómica de Podem, Pilar Lima, lanzó ayer un mensaje al president de la Generalitat, Ximo Puig, con el que quiso marcar posición respecto a la estrategia de acercamiento del PSPV con Ciudadanos (Cs), tras su reciente nombramiento al frente del partido morado.

«Xàtiva, Sueca, Torrent, Massalfasar y Xixona... Demasiadas 'excepciones' en las que el PSPV mira a su derecha para gobernar», escribió la diputada en un red social, aludiendo al goteo de acuerdos que los los socialistas están alcanzando con la formación naranja en diferentes municipios. «El éxito del Botànic nace de la convergencia de las fuerzas progresistas para gobernar con la gente. Ese es el único camino», apostilló Lima.

En las filas moradas, estas afirmaciones son señaladas como un toque de advertencia al PSPV. En cualquier caso, entroncan con la táctica adoptada por el líder nacional de Podemos, Pablo Iglesias, que el miércoles sentenció que que un Gobierno en el que esté Unidas Podemos es «incompatible» con pactar cuestiones «trascendentales» de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) con formaciones de la derecha como el PP y Ciudadanos.

En cualquier caso, el malestar por los acuerdos de gobierno y de presupuestos que los socialistas están alcanzando con Cs en diversos municipios se extiende hasta llegar al seno de Compromís, como se ha demostrado en las últimas semanas.

Comisión de seguimiento

El pacto de gobierno de Torrent acrecentó las suspicacias en la coalición valencianista, aunque tanto el PSPV como Cs mantienen una política de aproximación a todos los niveles que desde entonces no ha seguido de evidenciarse, también en las Corts. De esta forma, todo apunta a que la proliferación de estos acuerdos será uno de los asuntos a tratar en la comisión de revisión del Botànic II. Uno de los puntos pactados entre los tres socios que comparten el gobierno autonómico desde 2019 (PSPV, Compromís y Unides Podem) contempla que ninguna de las tres fuerzas formalizaría pactos de gobierno con otras formaciones políticas para dejar fuera a los partidos que integran la coalición. En las filas socialistas, sin embargo, se apela al contexto actual de crisis para defender la necesidad de consensos más allá de ideologías.