Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Miquel Mir: "Gloria nos dejó claro que debemos adaptar ya la costa a los temporales"

El conseller de Medi Ambient de Balears visita plantas de residuos en la Comunitat Valenciana que quieren copiar y aboga por las sinergias entre territorios vecinos ante problemas comunes como el calentamiento del Mediterráneo

El conseller Mir, hace una semana en su visita a las instalaciones del Oceanogràfic donde se trabaja en la preservación de tortugas. m. a. montesinos

Estuvo visitando las instalaciones de Mercadona en Burjassot donde ya se están adaptando a la Ley Balear de Residuos, pionera en el Estado en cuanto a eliminación de plásticos de un solo uso. ¿Cómo vamos los valencianos en ese capítulo?

Muchos de los aspectos recogidos en la Ley Balear de Residuos están incluidos en el Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana, por tanto tenemos la misma sensibilidad al respecto. Además, ya desde la anterior legislatura trabajamos codo con codo para compartir información.

La planta de tratamiento de residuos de Algímia d'Alfara, donde se recupera el 70 % de materia que entra, ¿qué le ha parecido? ¿Exportable a Baleares?

Sin duda es un ejemplo del modelo que quiere impulsar la ley balear. Es una planta modélica, donde la recuperación de los residuos que entran es manifiestamente elevada. En las islas estamos trabajando para garantizar que las futuras plantas de tratamiento que están en construcción en Ibiza y Menorca sigan el mismo patrón. La planta de Algímia es un ejemplo a seguir, sobre todo por el hecho de que refleja el modelo de residuos que aprobamos por ley en las Islas.

En la Comunitat Valenciana estuvieron a punto de aprobar una ley similar a la de ustedes en materia de Residuos y Economía Circular que decayó por la convocatoria de elecciones autonómicas en 2019.

Las Corts son soberanas para emprender y aprobar las medidas legislativas que considere oportunas para dar respuesta a la voluntad del pueblo que representa, pero las sinergias entre los distintos territorios es la única manera de encontrar soluciones firmes a un problema que es global.

Estuvo en el ecoparque de Nules. ¿También quiere copiarlo?

Desde el Gobierno de las Islas Baleares hace unos años que estamos trabajando en este modelo. Si bien es cierto que todavía nos queda camino por recorrer en términos de informatización y monitorización de los residuos que llegan, ya hemos iniciado el camino para poder replicar el sistema de Nules. No hay duda de que la trazabilidad ayuda a mejorar la gestión y, sobre todo, a tener un diagnóstico concreto y preciso de las tasas de reciclaje. Este debe ser el camino para incrementar nuestra eficiencia como administración.

El Mediterráneo es un territorio especialmente vulnerable al Cambio Climático. ¿Las estrategias de adaptación y mitigación, deberían de ir de la mano en autonomías como Baleares, Comunitat Valenciana y Catalunya?

La situación vivida en los últimos años en las Islas Baleares y en el resto de la costa mediterránea muestra como, de manera tácita y real, estos efectos son cada vez más recurrentes y virulentos. Un ejemplo son las grandes inundaciones vividas, tornados o las fuertes borrascas como Gloria, entre otros. Desde esta perspectiva es imprescindible e inaplazable que los territorios afectados como la Comunitat Valenciana o las Islas, reclamemos todas las medidas necesarias para revertir y minimizar estos episodios. La implicación del Estado español y la UE también es capital para ayudar a las comunidades autónomas.

Supongo que con la consellera Mireia Mollà hablarían largo y tendido de estas cuestiones.

Sí, y vamos en la misma línea. Por ejemplo a la ministra Teresa Ribera le he pedido no restaurar infraestructuras rígidas e ir a medidas blandas, por ejemplo en la línea de naturalizar la costa. Sabemos que no será de hoy para mañana. pero Mollà se sumó a esas peticiones. Territorios como los nuestros han de poder colaborar en la redacción de la Ley de Costas. Si algo nos dejó claro Gloria es que hay que adaptar ya la primera línea al cambio climático.

Ayuntamientos como el de Bellreguard fueron de los primeros en abrir el debate sobre la no reconstrucción de paseos marítimos que desaparecen en cada nuevo temporal.

Efectivamente, porque hay una realidad que no se puede negar y cada vez más gente se suma a esta corriente. Es tirar millones y millones de euros en regeneraciones que, además, la mayoría de las veces afecta seriamente a la biodiversidad marina.

La ciudadanía empieza a comprender la importancia del ecologismo y la sostenibilidad. Se ha visto hace nada en las elecciones francesas.

Mi partido Més per Mallorca representa el ecologismo político desde su nacimiento. Algo que nos permite disfrutar de parques naturales y espacios que estaban bajo presión de la especulación urbanística. Es evidente que se han cometido muchos desastres y mi intención como consejero es empezar a sentar las bases de la adaptación de la primera línea de costa a los efectos del cambio climático con temporales cada vez más intensos y frecuentes. El bienestar económico en el último medio siglo ha estado centrado en la explotación económica y urbanística de las playas. Hay que resolver esta dependencia y avanzar hacia un nuevo modelo más sostenible y que, a la vez, ofrezca oportunidades de llevar una vida digna. Los estragos del Gloria fueron un punto de inflexión.

Hay temas que son de interés común, como la preservación de la Posidonia, planta endémica del Mediterráneo.

Sí, sin duda. La posidonia es el gran pulmón del Mediterráneo, una joya ambiental única y muy frágil. El Gobierno balear ha sido pionero en aprobar un decreto para la conservación y protección de esta especie. Y somos la única administración de Europa que dispone de un servicio de vigilancia que se dedica exclusivamente a comprobar los fondeos.

¿Qué le parece la apuesta del Oceanogràfic para ir más allá de ser un mero parque de ocio y ser líder en investigación marina y protección de especies?

He quedado francamente impresionado de la calidad de las instalaciones del parque y de todo el trabajo que se hace en favor de la conservación de la biodiversidad. Esta sinergia es muy positiva para la recuperación de especies autóctonas y también en educación ambiental.

Compartir el artículo

stats