La Comunitat Valenciana fue la tercera autonomía que más creció en 2019 después de registrar un incremento del PIB del 2,3%. El repunte sitúa al territorio solo por detrás de Navarra y Madrid, al mismo nivel que Murcia y hasta tres décimas por encima de la media española, según los datos de contabilidad regional hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
A juicio el conseller de Hacienda, Vicent Soler, la cifra -anterior a la crisis provocada por la pandemia de la Covid-19- «certifica la consolidación del crecimiento estable de la Comunitat Valenciana desde 2016», puesto que, desde ese año, la subida media anual, tanto en materia de producción como de empleo, ha sido del 2,5%. Si se analiza el comportamiento de la autonomía por sectores, destaca el fuerte auge experimentado en el campo de los servicios de mercado (3,2 %) y, de forma más intensa, en las actividades profesionales, científicas y técnicas.
En términos de empleo, además, la C. Valenciana ha sido, después de Madrid, la comunidad autónoma donde más ha aumentado la ocupación (un 2,5 %), con 49.500 nuevos puestos de trabajo en el último año. Desde 2016, se han generado anualmente 87.600 empleos, lo que supone un total de 263.000 nuevos puestos.
En cualquier caso, el mismo informe también pone en evidencia que la C. Valenciana sigue presentando una renta per cápita y una productividad por ocupado inferior a la media nacional. Soler ha instado a que el reparto de los fondos europeos entre comunidades tengan en cuenta la infrafinanciación y el grado de impacto de la Covid-19 en los diferentes territorios. La economía valenciana será una de las más afectadas.