La Plataforma per la Llengua ha pedido a la delegada del Gobierno en València, Gloria Calero, que se investiguen las dificultades denunciadas por varios usuarios que quisieron realizar los exámenes del carné de conducir en valenciano y no pudieron. Esta pruebas son gestionadas por las jefaturas provinciales de Tráfico, a las que el citado colectivo ha pedido que subsane la carencia de impresos de exámenes en la lengua autóctona, de forma que las preguntas de los tests se formulen tanto en valenciano como en castellano.

La Plataforma per la Llengua censura la discriminación lingüística sufrida por un vecino de Alcoi que ha presentado una reclamación ante la Oficina de Derechos Lingüísticos de la Generalitat porque marcó la opción de hacer el examen del carné de conducir A2 en valenciano pero, al inicio de la prueba, un funcionario de la Jefatura de Tráfico de Alicante le respondió, según éste «de malas maneras», que solo había opción de realizarlo en castellano. El aspirante propuso al funcionario aplazar su examen para las semanas siguientes, pero, aun así, tal como indica en su queja, le contestaron que seguramente continuaría siendo en castellano.

Otro funcionario se dirigió al vecino para manifestarle la ausencia de impresos del examen en la lengua en la que lo solicitaba. «La conducta descrita es una vulneración del artículo sexto del Estatuto de autonomía de la Comunidad Valenciana, que proclama la oficialidad del valenciano, el derecho de los ciudadanos a usarlo y la prohibición de discriminarlos por esta razón», recalca la Plataforma per la Llengua, que también recuerda que la ciudadanía tiene derecho a dirigirse a la administración en la Comunitat Valenciana «en cualquier de sus dos lenguas oficiales».