El escenario que dibuja el responsable de la Hacienda autonómica, Vicent Soler, en la orden que activa el proceso de confección de los presupuestos de la Generalitat para 2021 contiene detalles que anticipan un año complicado.
En el documento, el Consell asume que va a elaborar las cuentas del próximo ejercicio sin conocer los ingresos procedentes del Estado, algo que ya anunció este diario en junio cuando informó de que los presupuestos se iban a elaborar a ciegas, y añade que será necesaria una revisión total de las partidas presupuestarias en un contexto de incertidumbre. En la previsión se da por hecho que 2021 será un ejercicio marcado de nuevo por las turbulencias derivadas de la pandemia.
El texto, publicado ayer, señala que será necesaria la revisión total de las partidas presupuestarias y avisa de que se evitarán «crecimientos no justificados». El año pasado, la elaboración de los presupuestos ya generó momentos de gran tensión entre los socios del Consell y el proyecto llegó a las Corts in extremis.
Para el próximo 2021, el Consell otorga máxima prioridad a los gastos relacionados con la pandemia y los sitúa solo por debajo de los que son estrictamente vitales para el funcionamiento de las conselleries. Ello con el objetivo de orientar todos los recursos disponibles al proceso de recuperación económica y social.
Soler explica que el objetivo es hacer compatible la garantía de los derechos reconocidos a la ciudadanía con el impulso a la reactivación económica pero en un contexto «muy complicado».
El Consell añade que nos encontramos ante una crisis «sin precedentes» que el Ejecutivo valenciano ha tratado de mitigar con medidas de apoyo a los sectores afectados, reorientando la política de gasto en estos meses. La previsión para 2021 es que continuen los efectos negativos derivados de la pandemia sanitaria y por eso en la elaboración de las nuevas cuentas las prioridades se centrarán en paliar los efectos negativos de la crisis priorizando los recursos disponibles hacia la recuperación sin perder de vista las prioridades marcadas por el acuerdo del Botànic: cambio de modelo productivo, creación de empleo, prestación de las políticas educativas, sanitarias y sociales, la lucha contra la exclusión social y potenciación de políticas de integración e igualdad.
Con todo, el responsable de Hacienda pone en valor la importancia de las cuentas autonómicas ya que la covid-19 ha puesto de manifesto el relevante papel que ejercen las autonomías en la prestación de los servicios públicos fundamentales.
Pide fondos extraordinarios
El conseller Soler lamenta que el sistema de financiación no garantice el principio constitucional de suficiencia financiera a los valencianos justo cuando más recursos se necesitan lo que perjudica las posibilidades de crecimiento.
Por eso pide que se asignen fondos extraordinarios o se corrijan las diferencias del actual modelo y pide que la estructura productiva de las autonomías sea un criterio a tener en cuenta en el reparto de las ayudas de la UE.
