Uno de cada tres jóvenes valencianos de entre 25 y 40 años sigue viviendo con sus padres. En concreto, un 32 %. Es el porcentaje más elevado de España, junto a Murcia, tras el 39 % de Andalucía y Extremadura. En Madrid baja al 16,4 %, según consta en un estudio de Aedas Homes sobre el impacto del confinamiento por el coronavirus en la demanda de viviendas entre ese colectivo. El informe de esta promotora detalla también que, en la Comunitat Valenciana, un 2 % de los jóvenes vive en pisos compartidos , un 24 %, de alquiler y el restante 42 %, en una vivienda de su propiedad.
El documento analiza cómo vive actualmente este grupo de población y los grandes cambios que se producen al pasar del grupo de edad de 25 a 34 años al de 35 a 40 años. En el primer colectivo, el número de jóvenes con dificultades para poder emanciparse es del 40,7%, frente al 10,2% del segundo. El retraso en lograr ese objetivo se debe a la falta del ahorro necesario para adquirir una nueva vivienda, una cantidad que se sitúa entre 40.000 y 50.000 euros de media. Una barrera «insalvable que les obliga a vivir con sus padres hasta más de los 30 años, muy por encima de la media Europa, que se sitúa en los 26 años».
Esta radiografía pone de manifiesto que el alquiler se posiciona como una opción estable tanto en el grupo de jóvenes de 25 a 34 años (27,5%) como en el de 35 a 40 años (27,4%). Por zonas metropolitanas, en Madrid el porcentaje de propietarios e inquilinos es similar (un 38% y 37% respectivamente), mientras que en Barcelona el alquiler es la opción favorita para el 34% de los encuestados, por encima de aquellos que viven en una casa en propiedad, el 27%. El porcentaje medio en Europa de personas que viven de alquiler se sitúa en el entorno del 30%, una cifra que ya alcanzan algunas zonas en España y que incluso superan esas cifras alcanzando a países como Reino Unido (34,9%) y Francia (35,6%).
La media nacional de jóvenes compartiendo piso es relativamente baja y oscila entre el 2% y el 4% en todas las zonas, aunque Madrid y Barcelona son las excepciones, ya que esta cifra se incrementa hasta el 11,4% y el 8,2%, respectivamente.
Por último, el informe confirma que el 70% de los jóvenes de entre 25 y 40 años asegura que le hubiera gustado vivir en una casa de características diferentes durante el confinamiento. A un 25% le hubiera gustado vivir en una casa más grande y a un 23,5% le hubiera gustado tener terraza o jardín.
