La comisión de seguimiento de centros residenciales, en la que están representadas la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, ha solicitado iniciar un procedimiento de investigación en la residencia de mayores Lope de Rueda de Torrent, de titularidad privada, para establecer si se han producido incumplimientos de la normativa que puedan derivar en sanción, tras una visita en el que se ha comprobado que hay elementos para imponer esa multa, según ha informado este departamento de la Generalitat en un comunicado. El brote se inició a través de uno de los profesionales del centro. Una vez fue notificado a la Vicepresidencia y a la Conselleria de Sanidad, «se ha estado haciendo seguimiento por parte de la comisión de recursos sociosanitarios en la que están los dos departamentos», concretó ayer Igualdad.

En este proceso, la comisión ha solicitado el inicio de un proceso de investigación, tras el informe desfavorable emitido a raíz la visita al centro, y para determinar si la actuación sería objeto de un procedimiento sancionador. Se trata, según fuentes de Igualdad, de «un caso puntual que se sale de la normalidad, ante el que se han tomado medidas concretas y así se seguirá haciendo en todas aquellas situaciones similares que se puedan producir».

De acuerdo con este departamento, la petición de investigación se ha realizado después de visitar el centro y comprobar que «existen elementos para imponer una sanción en el marco del decreto que establece un régimen sancionador específico contra los incumplimientos de las disposiciones reguladoras de las medidas de prevención frente a la Covid-19 en los servicios sociales». La directora general de Personas Mayores, Mercedes Santiago, explicó que ahora desde la conselleria se iniciará esta investigación para determinar si efectivamente el centro puede ser objeto de sanción.

«Hemos hecho las cosas bien y hemos cumplido con los protocolos, pero este virus es muy complicado de detectar y el problema está ahí», insistieron desde el centro afectado.

Aerte defiende a la residencia

Desde la patronal de residencias Aerte, a la que pertenece este centro, su presidente, José María Toro, indicó que la situación es «estable» y no presenta una evolución negativa, al tiempo que defendió que se han aplicado todos los protocolos. «Que un centro tenga casos, no quiere decir que se haya hecho algo mal», indicó, ya que hizo hincapié en que «no se puede blindar» a un posible contagio. Toro apuntó que se han aplicado los protocolos y el centro se encuentra bajo vigilancia activa de Sanidad «con control absoluto».