El verano ha cerrado en las carreteras interurbanas españolas con 202 fallecidos en 185 accidentes mortales de tráfico, 13 de las víctimas en la Comunitat Valenciana (un 3 % menos que en 2019), 8 en la provincia de Alicante, 4 en la de Valencia y una en Castelló, mientras que los desplazamientos han bajado un 9,18 % por la pandemia del coronavirus.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el director general de Tráfico, Pere Navarro, quienes presentaron ayer el balance de siniestralidad vial del verano, un periodo que ha registrado 82,8 millones de desplazamientos, lo que supone 8,4 millones menos que en julio y agosto de 2019. Y en este verano y año «extraños», en palabras de Marlaska, hay datos que llaman la atención: que haya sido el colectivo de los más jóvenes, el de las edades comprendidas entre los 15 y los 24 años, el único en el que han aumentado las muertes en carretera.

Un dato que preocupa a Interior y que parece ir en consonancia con los contagios de coronavirus, más extendidos entre los jóvenes, quizá por una menor concienciación del riesgo, tanto de los accidentes como de la pandemia. Otro dato negativo es el de los fallecidos este verano que no hacían uso del cinturón de seguridad. En concreto, 28 no lo llevaban puesto, lo que representa el 27 % del total de muertos.