El parón de quirófanos a causa del coronavirus en lo peor de la pandemia ha dejado una lista de espera para operarse de algo no urgente de147 días. Son casi cinco meses de espera media que se convierten, sin embargo, en siete meses si usted es paciente del Hospital Provincial de Castelló o se reducen a poco más de un mes, 38 días, si a usted le corresponda el centro de Elx-Crevillent. Porque la sanidad valenciana, en esto de esperar para entrar a quirófano, como en muchas otras de sus facetas, también va por barrios, o mejor dicho, por hospitales.

Según la lista de espera al cierre del mes de julio, hay casi seis meses de diferencia entre lo que esperan de media los pacientes más afortunados y los que peor lo tienen. De hecho, los habitantes de la provincia de Castelló son los que, con diferencia, salen peor parados en la comparación. De los cuatro hospitales en los que se divide la provincia, (Hospital Provincial de Castelló, Hospital de Vinaròs, Hospital General de Castelló y Hospital de La Plana), los tres primeros acumulan las peores cifras de todos los departamentos de salud, con una diferencia abismal con respecto a los mejores.

El consorcio hospitalario provincial de Castelló, dependiente de la conselleria y la diputación castellonense, detenta el peor registro: 211 días de espera media, siete meses completos. Muy cerca le siguen el centro de Vinaròs y el Hospital General de Castelló, con 207 y 206 días de espera, respectivamente.

Los que peor estaban

Son los que peor están porque, a grandes rasgos eran los que peor estaban antes de la pandemia. En febrero, el Provincial de Castelló también tenía el dudoso honor de encabezar esta lista con una espera de 158 días que se disparó a 273 días en junio. Sí es cierto que el centro ha podido reducir en julio algo sus tiempos pero sigue siendo el peor posicionado. El General de Castelló y el Hospital de Vinaròs eran el segundo y cuarto peor hospital según la lista de espera de febrero. En este caso, sin embargo, en ambos centros la situación ha empeorado con respecto a mayo.

En el extremo contrario están dos de los hospitales bajo concesión administrativa de los cuatro que aún hay en la C. Valenciana tras la reversión de la Ribera: Torrevieja, con 58 días de espera media, y Elx-Crevillent, con la cifra más baja, 38 días, casi igual al tiempo de espera prepandemia pese a que su lista de espera se duplicó en mayo. También eran dos de los que mejor estaban antes de la llegada del coronavirus y en ambos se ha hecho un esfuerzo en estos meses por rebajar lista: en Elx-Crevillent han rebajado el tiempo de demora un 54 %.

En la terna de mejores hospitales se cuela uno de gestión pública: el hospital valenciano Doctor Peset. Con una buena posición prepandemia de 46 días de espera media, el parón en seco de operaciones en marzo y abril hizo subir la espera a 119 días en mayo, cuatro meses completos. Desde entonces hasta el cierre de julio, el centro ha recuperado trabajo hasta rebajar a 77 días el tiempo medio para operarse después de reducir un 35 % el tiempo de espera.

Diferencias interprovinciales

Salvando la excepción de la provincia de Castelló, en la que se concentran los tres centros -de cuatro- con peores tiempos para entrar a quirófano, la variabilidad incluso dentro de una misma provincia es importante.

En la provincia de Valencia, el Hospital General, también un consorcio hospitalario cogestionado por la conselleria y diputación, es el cuarto centro con una lista de espera más abultada, 190 días en julio cuando sus cifras prepandemia eran de cuatro meses o el Hospital La Fe, con 171 días de espera, más del doble de la espera media de antes de la pandemia. Frente a estas cifras, está el hospital Doctor Peset, el mejor tercer posicionado o el hospital Arnau de Vilanova con 100 días de espera media (el doble de lo que tenía en febrero).

En Alicante la variabilidad también es alta: desde el Hospital San Joan d'Alacant, el sexto peor parado con 171 días de espera media, los mismos que La Fe, a los ya nombrados de gestión privada de Torrevieja o Elx-Crevillent o el de Elda, de gestión pública y con 83 días de espera media.

Las cifras, además, hay que ponerlas en contexto ya que desde hace unos meses la Conselleria de Sanidad decidió dar solo el tiempo de espera de la lista estructural, y no los tiempos totales, de forma parecida a la contabilidad que se llevaba en tiempos de Gobierno del PP.

Es decir, los días de espera que se ofrecen son desde que el especialista decide que hay que operar hasta que un paciente entra a quirófano pero sin contar el tiempo de más que suman aquellos que aceptan ir a la privada y hay una demora posterior achacable a la clínica privada; la de aquellos que dicen que no a la privada y siguen esperando un tiempo más en la pública -solo se cuenta la primera fase de espera- o el tiempo de más que esperan las personas que rechazan una fecha en la pública por cuestiones personales.