Tras reportar 960 contagios la jornada del viernes, la peor cifra en nueva normalidad registrada en la Comunitat Valenciana, la Conselleria de Sanidad informó ayer de 456 nuevas infecciones en las últimas 24 horas, el menor número de casos desde el 27 de agosto. También es el menor de los cuatro últimos sábados, cuando el departamento de Ana Barceló optó por reducir el apagón informativo de los fines de semana a únicamente los domingos. Asimismo, tampoco se produjo ningún fallecimiento según las cifras oficiales tras siete días con al menos dos muertes diarias por coronavirus. Por provincias, la conselleria ubica 69 de los contagios en Castelló, 168 en Alicante y 201 en Valencia. Además hay 18 casos sin asignar que elevan el acumulado pendiente de ubicación territorial en 26. Con todo, el total de positivos desde el inicio de la pandemia confirmados a través de pruebas PCR asciende hasta los 31.362. La información que proporciona Sanidad los sábados es sensiblemente menos detallada que la que ofrece de lunes a viernes. No incluye casos activos, número de PCR efectuadas desde la última actualización, ingresos hospitalarios en planta y en cuidados intensivos y tampoco desgrana la evolución de las residencias de mayores. Sí que recoge sin embargo los nuevos brotes detectados en la Comunitat Valenciana. Así, reporta 14 nuevos brotes en las últimas 24 horas. El mayor de ellos corresponde a Aielo de Malferit, con diez personas afectadas y de origen social. En esta misma localidad valenciana de poco más de 4.600 personas según el censo de 2018, se ha confirmado otro brote, también de origen social, con cinco positivos. El segundo foco más significativo confirmado en las últimas 24 horas se ha detectado en San Isidro, con nueve casos y también de origen social. Como viene siendo la tónica habitual, la ciudad de València aglutina buena parte de los nuevos focos. En el cap i casal se han detectado tres brotes. Uno de ellos, con cuatro positivos, es de origen «ocio-laboral», según Sanidad. Otro de ellos, también con cuatro casos, es de origen laboral. Por último, se ha notificado un brote de tres contagios y de origen social. El resto de brotes se corresponden a Altura (cuatro casos de origen social), Elche (cinco casos de origen laboral), Alzira (dos brotes de cuatro y seis casos, ambos de origen social), Algemesí (cinco casos de origen social), Orihuela (cuatro casos de origen social), Catarroja (cinco casos de origen laboral) yMoixent (cinco casos de origen social). Así, la Comunitat Valenciana acumula ya 738 brotes desde el inicio de la desescalada el pasado 21 de junio. La actual semana deja síntomas de que el ritmo de contagios está desacelerando. Esta semana se han registrado 4.160 infecciones frente a las 4.030 de los siete días anteriores, un 3 % más. Un incremento sensiblemente inferior al 11 % de crecimiento respecto a la anterior y un 54 % si se compara la última semana de agosto con la precedente. Igualmente, el número de hospitalizados se ha mantenido relativamente estable durante los últimos siete días, si bien es cierto que es la actualización de los lunes la que suele incluir el aumento en este apartado. Pese a ello, si hace dos lunes el incremento era del 20 %, el lunes pasado ´solo´ creció un 10 %. Pero tal y como advierten los expertos, las malas cifras en casos se trasladan primero a los ingresos y, posteriormente, a los fallecidos. Y así ha sido. Esta semana ha sido la peor de la nueva normalidad, con 27 fallecidos desde el lunes.