El Banco de España ha descartado una recuperación económica temprana y ha rebajado sus previsiones de crecimiento para 2021 a una horquilla de entre el 4,1 y el 7,3 %, mientras que sitúa la contracción para 2020 entre el 10,5 y el 12,6 %, en línea con lo previsto en junio para una recuperación gradual. De los tres escenarios que el Banco de España preveía en junio ha descartado el de recuperación temprana -tras los rebrotes de covid-19 y la mala evolución del turismo durante el verano- y ha desechado el de mayor riesgo porque no prevé un nuevo confinamiento generalizado, aunque sin descartarlo por completo. «La probabilidad de acabar peor es mayor que la de acabar mejor», aseguró ayer el director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce, durante la presentación de las nuevas proyecciones macroeconómicas. La entidad centra sus previsiones hasta 2022 en la hipótesis de una recuperación gradual para la que proyecta dos escenarios que dependen de los rebrotes y las medidas para contenerlos, después de un tercer trimestre para el que calcula un repunte del producto interior bruto (PIB) de entre el 13 % y 16,6 %. Tras el hundimiento histórico del 18,5 % del segundo trimestre, el repunte del tercer trimestre no servirá para recuperar los niveles precovid, ya que en comparación interanual el PIB registrará una contracción de entre el 12,3 y el 9,5 %.

«En el tercer trimestre se ha ido de más a menos y el cuarto trimestre también se va a ver afectado por la ralentización, lo que se refleja en ese 2021 a la baja», explicó Arce. La entidad calcula que al final de 2022 el nivel del PIB seguirá todavía entre 2 y 6 puntos porcentuales por debajo del nivel previo a la crisis, dependiendo del escenario considerado. En el primer escenario, el PIB se contraería el 10,5 % en 2020 y en el segundo la caída se ampliaría hasta el 12,6 %, en línea con el 11,6 % que la entidad preveía en su escenario central de junio. En 2021, el crecimiento del PIB alcanzaría el 7,3 % en el escenario uno y se quedaría en el 4,1 % en el escenario dos, en ambos casos por debajo del 9,1 % previsto en junio. Los avances serán más modestos en 2022, de entre el 1,9 % y el 3,3 %, cuando en junio la recuperación gradual se situaba en el 2,1 %. Ninguno de los dos escenarios contempla el efecto positivo «potencialmente relevante» que sobre el PIB tendrán los fondos europeos de hasta 140.000 millones de euros previstos para España, aunque Arce calculó que, en un ejercicio de «ejecución ideal», esos recursos podrían tener un impacto positivo sobre el PIB de 2021 y 2022 de alrededor de dos puntos en cada ejercicio. En un acto posterior a la presentación de las proyecciones, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, subrayó que la recuperación económica depende del mantenimiento de los estímulos a nivel nacional y europeo, no solo por el beneficio que conlleva su extensión, sino sobre todo por el riesgo que supondría su retirada prematura.